Hay en la pequeña ciudad turística de Las Terrenas una escuela cuya enseñanza se rige por la administración y los programas oficiales de la educación francesa  –al mismo tiempo que no se descuida la formación de los escolares en materias dominicanas como la lengua, la historia y la literatura–.

Unos 200 alumnos, repartidos entre maternal, primaria  y parte de la secundaria, están inscritos, siendo la mayoría franceses –Las Terrenas tiene una fuerte concentración de ciudadanos franceses residentes–, también hay escolares dominicanos y de otras nacionalidades. El plantel disfruta de una construcción nueva, funcional y agradable, con instalaciones que se prestan tanto para cursos y clases regulares como para actividades culturales y un espacio de exposiciones. Esta escuela, modelo en muchos aspectos, se llama “Théodore Chassériau”.

Explicación de un nombre. No había ciertamente una mejor designación para esa escuela que la de Théodore Chassériau, muy apropiada por los orígenes y el lugar de nacimiento de uno de los más grandes pintores franceses del siglo XIX, cuyas obras se expusieron por primera vez en Santiago y Santo Domingo en 2004-2005.

Théodore Chassériau vino al mundo en  República Dominicana, entonces Saint-Domingue. Era el año 1819. Su lugar de nacimiento se sitúa en El Limón y los historiadores han encontrado vestigios de la casa natal, la cual, según reporte de un descendiente, se hallaba en el centro de esa localidad, “a la derecha cuando se ha pasado el río, yendo hacia Morón”… La madre, Marie Madeleine Couret  había nacido también allí, donde estaba la finca y plantación paterna: la familia se había refugiado en Samaná huyendo de la revolución haitiana.

El padre, Benito Chasseriau,  ex militar, negociante, diplomático, se movía dentro del Caribe, al igual que otros parientes, y falleció en Puerto Rico. Ahora bien, en 1821, ante la inminencia de la invasión de Haití, los Chasseriau abandonaron Samaná y se fueron a París. A pesar de sus intenciones, Théodore, que emprendió una brillante carrera de pintor, nunca volvería al lar natal… muriendo joven, en 1856.

El nombre de Chassériau ha perdurado en la memoria samanense, y aquel joven establecimiento educativo de Las Terrenas fue distinguido con ese apellido, ilustre en la pintura romántica. No obstante, al alumnado, y aun a algunos profesores, hubo que informarles sobre esas motivaciones y el nacimiento, la vida, la obra del pintor: hoy en día la escuela se enorgullece de su nombre, y una exposición conmemorativa, muy bien organizada, acaba de celebrarse.

La exposición Chassériau. Según una tradición francesa, la escuela entera se movilizó, desde la dirección y el profesorado hasta los alumnos de todos los cursos.

Una investigación y recolección sorprendente de documentos bibliográficos hizo posible una información muy completa, que  incluyó  un video sobre  Chassériau:  se presentaron datos, explicaciones e imágenes –entre ellas la reproducción al tamaño de dos cuadros del Louvre–, y una amplia exposición, realizada por el alumnado, demostró cómo  habían  interpretado dibujos y pinturas del artista decimonónico.

Zoom

Exposición de cuadros de Chassériau

Una segunda exposición de obras originales de Théodore Chassériau en República Dominicana está en estudio, con una selección de dibujos, acuarelas y óleos, privilegiando el color, a diferencia de la primera, que fue en blanco y negro. Están involucrados el Museo de Louvre y coleccionistas.