Es indiscutible que si algún olor tiene la Cuaresma, además del producido por el incienso purificador, es el del bacalao, y decimos olor, que no aroma, porque una de las grandes virtudes o misterio que tiene este alimento es que en su estado de comercialización su aspecto no resulta muy atractivo. Sin embargo, luego de cocinado el plato es capaz de despertar auténticas pasiones gastronómicas.
Se trata de un bocado para gastrónomos adultos, de paladares experimentados; es un sabor capaz de embrujar a más de un comensal que valore lo exquisito.
Aunque en nuestro país el bacalao se come todo el año, es en estos días de Cuaresma cuando es más apreciado. Y es que estamos hablando de uno de los productos que mayor número de posibilidades ofrece a los cocineros y, por ello, muchas amas de casa se muestran encantadas de elaborar el plato principal en torno a al bacalao.
Propiedades
Es un pescado blanco y, por lo tanto, tiene un bajo contenido graso. Almacena sus reservas de grasa en el hígado, el cual se emplea para la obtención de aceite.
Su carne es rica en proteínas de alto valor biológico y además posee variedad de vitaminas B1, B2, B6 y B9.
Todas ellas poseen importantes funciones, ya que permiten el aprovechamiento de los nutrientes energéticos, es decir, de hidratos de carbono, grasas y proteínas, y además intervienen en procesos de gran importancia en el organismo, como la formación de glóbulos rojos, la síntesis de material genético y el funcionamiento del sistema nervioso.
El bacalao también posee gran cantidad de vitaminas D, E y A.
Los trucos. Para reconocer un bacalao seco de buena calidad debe fijarse en que su tonalidad sea marfil.
Cuando el tono es demasiado blanco puede significar que no ha sido salado suficientemente. Si presenta un tono bastante amarillo indicará que está viejo.
Inspirados en el bacalao
Desde el año pasado, Álvarez & Sánchez C. por A. representa la marca Bacalarico.
Considerando que ahora inicia la Cuaresma, la empresa ofrece al público variedad de recetas fáciles y prácticas para su preparación para la temporada cuaresmal, como el caso de Bacalao cremoso.
Otra marca que ofrece ideas es Bacalao Noruego, que presentó las recetas ganadoras del año pasado de la quinta versión del festival gastronómico denominado Coronando el sabor con Bacalao Noruego, en dos categorías, gourmet y casera, como son Bacalao noruego en pasta de salsa blanca y también Capullo de pollo a la parrilla en salsa Padi.
Recetas
Bacalao en salsa blanca
21/2 libras de bacalao noruego (desalado y desmenuzado), 1 libra de pasta de su preferencia (precocida), 1 cdta de ajo ,1/2 libra de queso mozzarella, 2 tazas de salsa bechamel, sal, orégano , pimienta al gusto.
Preparación. Sazone el bacalao desalado y desmenuzado con el ajo, sal, orégano y pimienta y reservar. Coloque en un pyrex una capa de la pasta precocida y vierta la mezcla del bacalao sazonado. Ponga una capa de pasta y vierta por encima la salsa bechamel. Por último coloque el queso mozzarella por encima. Lleve al horno a 350 grados por 25 minutos, deje refrescar y sirva.
Capullo de pollo en salsa Padi
1 libra de bacalao, 21/2 pechugas de pollo majadas y sazonadas con sal, pimienta y vino blanco, un hilo de diez pulgadas, 2 onzas de queso crema, 1/2 ají morrón rojo, Para la salsa 1 taza de consomé de pollo, 2 dientes de ajo picaditos, 2 hojas de albahaca picada, 1/2 barra de mantequilla, 1/2 cebolla grande picadita, 1/2 ají morrón picadito, 2 tomates bugalú, picaditos sin semillas, 2 matitas de cilantro ancho, 3 cucharadas de salsa de tomate, 1/2 taza de crema de leche, 1 lechuga, sal y pimienta al gusto
Preparación. Tome las pechugas abiertas y sazonadas y agrégueles el queso crema, el bacalao cortado a la juliana y el ají. Luego forme un capullo con las pechugas cuidadosamente, y amarre con el hilo y ponga a la parrilla por 20 minutos. Para la salsa: ponga en una sartén la mantequilla y sofría los vegetales, agregue el consomé de pollo y deje coser por tres minutos, cuele esta salsa y llévela de nuevo a la sartén a fuego medio. Agregue la crema de leche, deje cocer por cinco minutos y póngala por encima a los capullos. Se sirve en una tabla y se decora con la lechuga.