Se terminaron las fiestas navideñas. Ya hemos retirado el árbol de Navidad, los cojines, las flores de Pascua, etc, y ¿vuelta a la normalidad? Sí y, es buen momento para darle un toque diferente al hogar.

Ya sea por darle un enfoque minimalista a la casa o simplemente para aclarar las ideas, el deseo de cambiar o adaptar la decoración de la casa después de Navidad parece tener cada vez más seguidores.

Los primero que debemos hacer es recoger todos los adornos. Una vez que el árbol esté limpio de guirnaldas, luces y bolas de debe almacenar, ¡es hora para embarcarse en el gran proyecto decorativo de inicio de año!

Cuando guardamos los adornos de Navidad, muchas veces sentimos que la casa se ve vacía, que le hace falta algo. Claro, el árbol, las luces y los adornos, nos hacen sentir que la casa está bien colorida y llena. ¿Pero cómo podemos hacer la transición a esta nueva fecha? La clave es reinventar la decoración siguiendo algunos consejos sencillos.

Empezar en algún lugar. Si deseas despejar tu hogar pero la magnitud de esta tarea te asusta, comienza por elegir un espacio pequeño de tamaño modesto en lugar de cambiar la decoración de todas las habitaciones al mismo tiempo.
Reciclar vender o regalar. Es posible que tras volver a organizar tu hogar hayas descubierto cosas que ya pensabas que ni existían o que ya no te gusten como antes. Tienes la opción de donarlas, venderlas o incluso reciclarlas.
Iniciar la redecoración. Añade plantas y flores naturales al espacio, así conservas esa sensación de verdor y naturalidad. Recuerda usar plantas de interior para que perduren.
A un jarrón de cristal alto, añádele ramas secas y unas cuantas luces. Eso reemplazará visualmente el árbol, de una forma distinta y creativa.
Cambiar de lugar… Reubicar los muebles, los cuadros y esos objetos que te gustan. Cambiarlos de lugar crear una atmósfera de renovación.
Limpiar los espacios. Mantener la casa limpia, fresca y bien aromatizada favorece un clima de paz y armonía en el hogar.