Tanto si es con uno o con otro, posiblemente tengas hipersensibilidad dental (o dientes sensibles), uno de los trastornos bucodentales que peor toleran los pacientes y que es bastante común (cerca de 38% de los adultos la sufre cada vez que come ciertos alimentos o a ciertas temperaturas). No es una enfermedad sino más bien una afección que se desarrolla con el tiempo debido a factores comunes como encías retraídas, cepillado de los dientes excesivamente agresivo y bruxismo. Dentífricos específicos.

El contacto con el frío aumenta la sensibilidad, por lo que el uso de dentífricos específicos será de buena ayuda.

A continuación algunos prácticos consejos para evitar estas incómodas molestias.

Evitar la ingestión de cítricos y zumos ácidos. Si sufrimos sensibilidad dental, este tipo de alimentos y bebidas la acrecientan.

Combatir las caries. Cuando hace frío, tendemos a tomar alimentos dulces para generar más calor corporal, por tanto es recomendable mantener una mejor higiene dental. Si no podemos lavarnos los dientes después de ingerir este tipo de alimentos es aconsejable, para contrarrestar temporalmente estos efectos, tomar algún lácteo como queso con poca grasa o leche. Para luego realizar una adecuada limpieza.