Hoy 
PASTOR VÁSQUEZ
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La Constitución de la República, en su artículo 8, acápite 11, inciso D, consagra el derecho del trabajador a la huelga. Sin embargo, en ese mismo acápite queda claro que los servicios públicos esenciales para el Estado no se pueden interrumpir y hay penalidades legales para quienes vulneren ese precepto constitucional.
Tienen derecho los profesores y empleados de la Universidad Autónoma de Santo Domingo a protestar por el legítimo aumento salarial, pero eso de interrumpir prolongadamente la docencia hasta poner en peligro un período académico es un abuso.
Es un abuso aun más cuando se sabe que estamos en un período electoral y que siendo este país una nación de sólo 48.442 kilómetros cuadrados cualquier protesta repercute en la conciencia nacional.
Están mal los que patrocinan la huelga prolongada en la universidad y están mal por la forma y por el momento en que la están haciendo y por la prepotencia y la arrogancia con que actúan.
Pienso que en esa huelga está la mano de la derecha reaccionaria que quiere causar el caos en la universidad para desacreditarla y luego echarle la culpa al Gobierno.
Hay elementos de derecha que no soportan la existencia de esa universidad y yo mismo los he escuchado hablar aberraciones de la UASD.
Esos elementos de la derecha rancia, que están en todos los partidos, pero que ahora se concentran en mayor número en el grupo llamado PPH, están tratando de pescar en río revuelto en una época electoral.
En la huelga de los empleados universitarios no sólo hay una conspiración de esa derecha para desacreditar y lograr la privatización de la universidad, sino que hay una estrategia trazada para tratar de perjudicar al Gobierno y restarle votos a los candidatos del Partido de la Liberación Dominicana antes del 16 de mayo.
La intransigencia no lleva a ninguna parte y esos dirigentes se han mostrado súper intransigentes.
El rector Roberto Reyna sólo tiene unos meses en el cargo y de inmediato surge esta huelga. Pienso que esto estaba planificado con anterioridad.
¿Por qué hacer la huelga ahora y no después del 16 de mayo? Eso tiene pringamosa. ¡Ojo pelao!
