Tierra Alta 
CRISTINA LIZARDO, EN EL DÍA DE LA MUJER

Tierra Alta <BR><STRONG>CRISTINA LIZARDO, EN EL DÍA DE LA MUJER</STRONG>

PASTOR VÁSQUEZ
Cuando en el globo terráqueo más de nueve mujeres han ascendido al trono presidencial o son Primeras Ministras de sus países (Chile, Liberia, Alemania, etc.) me he puesto a observar el liderazgo femenino en la República Dominicana y veo muchas sombras, pero también veo luces.

No sé por qué he pensado que esa joven que le llaman Cristina Lizardo se encamina a un liderazgo sin precedente en nuestro país. Sin ser un clarividente, veo en la mirada tierna de esta mujer un futuro de grandeza. En ese momento pienso en la figura egregia de Indira Gandhi y me pregunto: ¿Tendremos algún día una mujer de esa talla sentada en el trono? Creo que estoy exagerando.

Esta mujer tiene una trayectoria asombrosa, que nos indica un futuro glorioso en la vida política nacional. Veamos lo que nos dice sobre ella el periodista Miguel Ángel Rodríguez, su compañero de partido y miembro del Comité Central del Partido de la Liberación Dominicana:

“Cristina Altagracia Lizardo ingresó al Partido de la Liberación Dominicana en medio de la turbulencia política que vivía el mundo: dos polos  ideológicos se repartían las pasiones del mundo político contemporáneo.

Era la llamada Guerra Fría, en que  la desaparecida Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y los Estados Unidos de Norteamérica se lanzaban dardos ideológicos sin tregua y sin reposo.

Cristina no estaba exenta a ser contagiada con esas pasiones que abrazó a toda la humanidad, pero el mayor de los contagios lo recibió del profesor Juan Bosch. Ahí empezó con el embrujo consciente de  hacer suyo el lema de servir  al partido  para servir al pueblo, e ingresó en un círculo de estudio donde empezó a desarrollar lo que ya le sobraba en calidad: su vocación de  entrega y servicio.

Su capacidad  y perseverancia la hacen merecedora de la confianza de sus compañeros y pasa  a ser dirigente de nivel medio del Comité Intermedio César Augusto Sandino, legendario luchador anti-imperialista nicaragüense.

Años más tarde se traslada a la zona oriental de la entonces no dividida ciudad de Santo Domingo y se inserta en el Comité Intermedio Celia Sánchez, comandante de la revolución cubana, desaparecida en los albores de la revolución castrista, y de ahí pasa a la filas de los cuadros del  PLD, como activista nacional.

Al desarrollar su condición excepcional la hacen merecedora de ser elevada de categoría y la colocan como vicesecretaria de la Secretaría de activistas y métodos, el estamento de más alto nivel de formación política en el PLD.

Juntamente con esa tarea política, va sirviendo  al país como maestra y regidora del Ayuntamiento de Santo Domingo, posición que ocupa por dos ocasiones consecutivas.

En esa época pasa al Comité Central de la organización que fundara Juan Bosch para darle contenido político a la vocación de servicio del país, pero concomitante con esto pasa a ocupar la vicesecretaría general del PLD, posición que desempeña por tres periodos consecutivos para de ahí pasar al Congreso nacional como diputada ejemplar.

La senadora de la hoy Provincia de Santo Domingo acumula experiencia aquilatada, y cuando el doctor Leonel Fernández accedió a la primera magistratura del Estado, fue nombrada subsecretaria  de  la Presidencia  de  la República.

Poco tiempo después pasa a ocupar por segunda vez  una curul en el Congreso Nacional, posición que ocupa en la actualidad, compartiéndola con su condición de miembro del más alto nivel de dirección del PLD, el Comité Político.

Cristina Lizardo, regidora, diputada, subsecretaria de la Presidencia, profesora, abogada, madre, esposa ejemplar, amiga solidaria y militante por las mejores causas, es la senadora, una líder natural.

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