“Se perdieron 20 años del fútbol dominicano”.

Esa es una respuesta que hemos dado cuando se nos pregunta sobre el desarrollo del fútbol de República Dominicana con relación a la dirigencia que se gastó nuestro balompié desde 1998 hasta la fecha.

El auge que tenía nuestro fútbol en la última década del Siglo XX se fue perdiendo paulatinamente cuando entramos al presente siglo.

La pantalla de la capital no era la realidad de todo el país. Y aquí, en Santo Domingo, lo que veía como desarrollo era más un fútbol recreativo, con el surgimiento de varias canchas de fútbol sala: Media Cancha, Soccer Town, City FC, etc.

Por el 2005, aproximadamente, la pasada y sancionada dirigencia informó a la FIFA que en el país había 500 mil futbolistas. Sí, así mismo, medio millón de personas se dedicaba a la práctica del fútbol. Una gran mentira. Calculamos para la ocasión que debía haber por los menos 15 futbolistas en el DN y cada una de las 31 provincias.

Hicimos un censo en el Gran Santo Domingo (el Distrito Nacional y la provincia de Santo Domingo) y no pasaban de los dos mil jugadores. Imagínense en las provincias. En Moca, ciudad futbolera, no pasaban de 400.

Lo que preguntamos ahora, que tenemos nuevas autoridades en el fútbol dominicano, es qué se está haciendo para emprender un desarrollo y una masificación del fútbol dominicano.

Estas autoridades asumieron la FEDOFUTBOL en enero de 2020, y aunque llegó dos meses después el confinamiento pandémico, sí han tenido tiempo de preparar un programa de desarrollo para nuestro fútbol.

Todo ha estado paralizado, pero ha habido tiempo para pensar y crear, para que tan pronto se abran las puertas dar riendas sueltas a lo planificado. Si lo han hecho así, darán muestras de que son verdaderos dirigentes deportivos. Si no, la FEDOFUTBOL les quedará grande a esa dirigencia.

Si solo se han limitado a nombrar “comisiones”, y un entrenador para la selección, demostrarán que les falta mucho.