¿Se imagina un paseo por la Quinta Avenida de Nueva York en una tarde de otoño, vestida con una elegante chaqueta, unas botas y cartera, todo en cuero y un jean? De veras que su look sería diferente y a la vez espectacular.
Todo gracias a las propiedades que posee esta textura que entre las nobles hay que hacerle un aparte.
Por su procedencia y fabricación, cuando es puro, su delicadeza y versatilidad lo convierten en hacedor de estilo propio.
Esas razones le permiten al señor cuero, o piel, ocupar un sitio en el armario y ser tomado en cuenta por una gran mayoría de notables diseñadores en sus colecciones de temporada; si no observen esta chaqueta en piel genuina de conejo.
Pero no solamente este material brilla en carteras, bolsos, chaquetas y botas, también en faldas y si son mini… qué bien! Igualmente en shorts y en leggings. ¿Los colores? gris, marrones, negro y terracotas.
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¡Cuidado!
Aunque una pieza sea elegante y comodísima, hay que reparar en el clima, porque en verano y si estamos en el trópico no es recomendable usarlo, pero si estás en un clima cálido o invernal… úselo a todas sus anchas.