“Todo STRAUSS” brillante cierre

“Todo STRAUSS” brillante cierre

El maestro José Antonio Molina y la soprano Nathalie Peña-Comas en el Concierto de Clausura de la Temporada Sinfónica 2021.

La Temporada Sinfónica 2021 pasará a la historia por la excelencia de sus cinco conciertos, en los que la Sinfónica Nacional ha dado muestra de entrega, compromiso y, sobre todo, del nivel superior alcanzado.


La Temporada Sinfónica 2021 pasará a la historia no solo por las circunstancias en que vive la humanidad, sino también por la excelencia de sus cinco conciertos, en los que la Orquesta Sinfónica Nacional, ha dado muestra de entrega, compromiso y, sobre todo, del nivel superior alcanzado.


El concierto de cierre de temporada dedicado al gran compositor alemán Richard Strauss, se inició con su poema sinfónico “Don Juan” Op.20. La figura del Tenorio inmortalizada por Tirso de Molina en su obra “El burlador de Sevilla”, por José Zorrilla en “Don Juan Tenorio”, así como por Moliere, Espronceda, Dumas, Byron y otros escritores, motiva también a músicos como Mozart, que fascinado por el mito, compone su ópera “Don Giovanni”.

Inspirado en el poema de Nikolaus Lenau, -cuya figura del don Juan no es la más tradicional- Richard Strauss crea su genial poema sinfónico en un movimiento “Don Juan” Op.20, cuya forma musical se acerca al rondó, la más apropiada para describir a través de los diferentes temas musicales los plurales rasgos del personaje.

El director, la orquesta, se hacen cómplices de cada aventura y nos transmiten toda la belleza musical del genial compositor.


El programa continuó con “Las cuatro últimas canciones” Op.150, teniendo como solista a la soprano dominicana Nathalie Peña-Comas. Esta obra, considerada el último capítulo en la literatura lírica post romántica, está inspirada en tres poemas de Herman Hesse y un cuarto de Von Eichendorff. Los cuatro poemas versan sobre la aceptación del inexorable destino, convertidos en canciones de despedida con maravillosas frases vocales, enmarcadas por clarinetes y oboes como “lluvia que empapa la tierra receptiva”.


En la primera canción, “Primavera”, la voz de la soprano se escucha sosegada, y la intervención de la trompa es notable. En la segunda y tercera canciones, “Septiembre” y “Al irme a dormir”, Nathalie muestra una potente emisión del registro medio agudo. El solo de violín en “Septiembre” es enternecedor.

El ambiente nostálgico cercano a la despedida, se transmite en la cuarta canción “El Ocaso”, la voz de la soprano por momentos se convierte en un murmullo, y con el “fiato” bien manejado logra resistir las largas frases sin tomar aliento. Nathalie nos envuelve con su voz acariciante y su gran musicalidad. La dirección precisa de Molina no permite, no obstante la propia concepción orquestal de la composición, que la voz de la soprano sea opacada. Aplausos y bravos se escucharon desde la platea.


El concierto cierra con las “Alegres travesuras de Till Eulenspiegel”. Este poema sinfónico Op.28, está inspirado en este bufón alemán o flamenco, personaje truhanesco, real o leyenda, que burló con picardía a las autoridades, a los burgueses engreídos. El inicio del poema “Cómodo” corresponde al “Erase una vez” de los cuentos de hadas.

La figura de Till es descrita en una frase audaz, despreocupada, por el corno –Héctor Rodríguez-, luego una instrumentación estupenda describe sus aventuras, y la picardía, la alegría de Till, brincando y silbando por los caminos, se expresa en un solo del violín concertino -Zvesdana Radojkovic-.

El final de Till es anunciado con vibrante percusión, y tras su muerte, el epílogo nos remite al prólogo “Había una vez”…todo era un cuento. Este poema sinfónico no podría producirse sin una orquesta bien articulada, con músicos de gran nivel como los componentes de nuestra Orquesta Sinfónica Nacional, capaces de producir la magia, bajo el hechizo del gran encantador, el maestro José Antonio Molina.


El público numeroso dejó ver su satisfacción no obstante las mascarillas, y aplaudió generosamente, divirtiéndose entre conquistas y travesuras, tal y como expresara el propio Strauss: “estas obras fueron compuesta con la intensión de divertir en una sala de conciertos”, y es que la diversión es algo consustancial al ser humano. Un magnífico e inolvidable cierre de Temporada Sinfónica, con optimismo esperamos la próxima Temporada 2022.