Tony Isa Conde: Sin energía no hay desarrollo

Tony Isa Conde: Sin energía no hay desarrollo

POR LEONORA RAMÍREZ S.
Sin energía no hay desarrollo, planteó Antonio Isa Conde, asesor Industrial del poder Ejecutivo, al analizar las desventajas que tienen los sectores productivos con un servicio eléctrico deficiente, en momentos en que el país entra en un proceso de competitividad con mercados regionales.

El funcionario, en el almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio al que asistió en compañía de los miembros del Consejo Nacional de Competitividad (CNC), expresó que ante las debilidades del sector eléctrico se deben eficienciar los eslabones que intervienen en el proceso de producción.

“Hay que insistir en la mejoría de los servicios de aduanas, del sector financiero, establecer una reforma fiscal integral, porque no podemos quedarnos sentados esperando la solución del problema eléctrico para poder competir”.

En ese sentido, Andrés Vanderhorst, director del CNC, expresó que tratan “de generar espacios para que nuestra dependencia hacia el modelo eléctrico actual se disminuya, creando proyectos de bioenergía que van a resolver problemas de pequeñas y medianas empresas”.

De hecho, Jesús de los Santos, coordinador de Agronegocios del CNC, anunció que realizan estudios para producir biogasoil con higuereta, tomando como ejemplo experiencias positivas que se desarrollan en Brasil.

“En dos años, con las debidas inversiones, podríamos estar en capacidad de producir biogasoil, al sembrar de higuereta 60,000 tareas ubicadas en la zona Suroeste, desde Barahona hasta la zona fronteriza”, expresó.  

VIEJO PROBLEMA

Al vincular la relación entre la crisis actual del servicio eléctrico, con el proceso de capitalización de la Corporación Dominicana de Electricidad (CDE) que él dirigió en el primer mandato del presidente Leonel Fernández, Isa Conde dijo que se suponía que el Estado no iba a renunciar a su rol de ente regulador del sistema.

Urgando en los antecedentes de la privatización expresó que, en el período en que se inició la CDE ni siquiera era objeto de crédito, por lo que se creó un Ley que permitía la inversión extranjera.

“La reforma del sector eléctrico tenía premisas determinadas, que eran tratar de evitar la intervención permanente del Estado, sobre todo mediante los subsidios.

“Pero el Estado sacó de nuevo del sombrero el subsidio, no lo pudo cumplir y aparecieron los apagones financieros, y en vez de ir a la raíz del problema se hizo una contrarreforma”, expresó.

Isa Conde dijo además que el Estado no tenía contratos directos de compra y venta de energía, y que los que se originaron, de cara a la privatización, entre los generadores y distribuidores, el gobierno no era responsable porque tenían fecha de vencimiento con compromiso de licitación, lo cual debió ocurrir en el 2004.

“Por obtener una pequeña reducción en el precio inmediato se prolongaron esos contratos a 15 años, por lo que desde ese momento la reforma se frustró, porque el eje de la reforma era que todos los contratos de compra y venta de energía se licitaran una vez vencidos.

“Todo culminó con la recompra de Edenorte y Edesur, por parte del Estado, pero lo que había que hacer era expropiarlas.

“La reforma no concluyó, y lo único que se logró fue estimular el aumento de la generación, pero el problema ahora es que no tenemos el dinero para comprar la energía servida”, expresó Isa Conde.

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