Topógrafos corneales, lentes intraoculares y rayos láser de última generación, hacen más precisa la cirugía refractiva

Topógrafos corneales, lentes intraoculares y rayos láser de última generación, hacen más precisa la cirugía refractiva

Topógrafos corneales, lentes intraoculares de última generación  y sofisticados equipos de rayos láser, son el arsenal que permite a experimentados cirujanos refractivos dominicanos obtener grados de corrección nunca antes alcanzados en el tratamiento de la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo, la presbicia y los queratoconos.

Más allá de la ablación personalizada han colocado tales avances científicos a la cirugía refractiva, en beneficio de pacientes con aberraciones de la córnea, estructura transparente que refracta y transmite la luz que entra al ojo  imposibles de reparar hace apenas unos años, asegura el doctor Rafael Féliz, especialista de Centro Láser.

El cirujano refractivo afirma que es técnicamente posible corregir perfectamente dichas aberraciones, produciendo imágenes perfectas en la retina e incluso lograr en algunos casos una visión superior a la conocida como 020-20.

Féliz acota que la cirugía refractiva es realizada exitosamente en el país con rayos láser desde hace más de diez años, específicamente con el Láser Excimer.

Dicho aparato emite una luz ultravioleta con una longitud de onda de 193 nanómetros y constituyó una auténtica revolución que desplazó a otras técnicas por ventajas como la rapidez en la recuperación visual, la precisión del procedimiento, la estabilidad del resultado y la seguridad de la técnica.

El Láser Excimer es aplicado sobre la córnea o primer lente del ojo para cambiar la forma de esta, aplanándola en los miopes y curvándola en los hipermétropes, para conseguir el enfoque correcto de las imágenes.

El rayo sigue siendo el mismo, pero ha variado el diámetro y la forma del disparo, el modo en este que llega a la córnea. Además, esta tecnología es actualmente complementada con otros avances científicos, como el de los topógrafos corneales de extraordinaria precisión en la medición de la curvatura y elevación de esta superficie ocular, explica Féliz.

 Agrega que en la pasada década se incluyó al Láser Excimer la capacidad de rastrear el movimiento del ojo, de manera que si el paciente lo mueve en un momento determinado de la cirugía, el rayo puede seguirlo.

Uno de los topógrafos más exactos utilizados actualmente por los cirujanos refractivos es el Pentacam Oculus, el único que utiliza una tecnología de video imágenes Scheimplufg, la cual es capaz de hacer una rotación completa en un ángulo de 360 grados.

Personalizado

En Centro Láser ofrecemos soluciones aprobadas por la Food and Drug Administration (FDA), de Estados Unidos,  para todos los defectos refractivos: hipermetropía, miopía, presbicia, astigmatismo y, en algunos casos, el queratocono, expone Féliz.

Para ello, son utilizados la cirugía láser personalizada con la medición específica de cada ojo, dado que ningún ojo es igual a otro – señala Féliz- y el implante de lentes intraoculares.

Para el astigmatismo, defecto de la curvatura de la córnea que impide el enfoque claro de objetos cercanos o lejanos, la solución es la cirugía láser, junto a los lentes de contacto implantables en casos de astigmatismo alto, indica Féliz.

En tanto, para la miopía mala o visión lejana se acude a la cirugía láser; la presbicia, disminución de la capacidad acomodativa del ojo, es tratada con lentes intraoculares acomodativos o pseudoacomodativos; mientras, para la hipermetropía, mala visión cercana, son combinadas la cirugía láser y los lentes intraoculares.

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