Hoy 
POR HÉCTOR GARCÍA
LAKELAND, Florida.- No tengo la menor idea si ocurre con otros periodistas, pero en mi caso, varias figuras del béisbol de las Grandes Ligas, a quienes les solicité entrevistas para mi programa de televisión Momento Deportivo, me pusieron como condición que no tocara el tema esteroides.
No me quedó más remedio que aceptar las condiciones de los estelares y aquí en esta pequeña ciudad, he logrado muy buenos trabajos para el programa de televisión y para mis lectores en este diario y en el Internet.
Conversé con el receptor de planta del equipo que entrena aquí, los Tigres de Detroit, Iván Rodríguez, de quien mucha gente tiene un criterio errado, porque entienden que es un «comparon y sangre azul».
Resulta que Iván, lo único que condicionó para la entrevista fue que no tocara el tema Esteroides. Hablamos alrededor de cinco minutos y luego se ofreció para gestionarme otros peloteros, lo que agradezco sinceramente.
Iván, me dijo que no descarta volver a jugar béisbol invernal en Puerto Rico y también me habló de que podría regresar a la Serie del Caribe.
Agregó que tiene un externo agradecimiento al béisbol de Puerto Rico, pero aclara que, no está participando en los torneos de su país, porque es el tiempo que dedica a su esposa e hijos, los cuales están creciendo y necesita estar con ellos.
MAGGLIO ORDOÑEZ
El venezolano Magglio Ordóñez, quien firmó un contrato por cinco años y 75 millones de dólares, con el conjunto de Detroit, me dijo que espera contribuir grandemente con la causa de la novena.
«Estoy preparando tranquilamente, para no sufrir una lesión en mi rodilla derecha, me siento bien y en los próximos días espero estar en plenas condiciones físicas», me explicó.
Hablamos también del béisbol invernal y me dijo que «no participó en esta temporada porque los fanáticos de Venezuela irrespetan a los peloteros Grandes Ligas».
Y, agregó: «ellos quieren que a los jugadores Grandes Ligas, todo le resulte bien en el terreno y no es así, por lo que maltratan al pelotero y hasta les lanzan objetos desde las gradas».
Ordóñez, puso como ejemplo a la fanaticada dominicana, «la que resalta y vive los triunfos de sus peloteros, los ama y los respeta y eso motiva. Si los venezolanos fueron como los dominicanos, otra cosa sería, estaríamos todos en el terreno de juego y en la Serie del Caribe», terminó diciendo.
EL BÉISBOL Y LAS LEYES
En los campos de entrenamientos del béisbol de las Grandes Ligas, nadie, absolutamente nadie, quiere mencionar la palabra esteroides. Solamente algunos periodistas.
En momentos de descanso, cuando viene el tema, entrenadores de equipos menores que están presenciando el juego, dejan el limpio y se alejan de los reportes.
Yo decía una mañana de estas, no recuerdo que día, que no entendía por que Bud Selig, criticaba públicamente la implicación de los políticos en el grave problema y escándalo del consumo de esteroides en el béisbol.
Y agregaba que no entendía tampoco, por que se negaba a asistir al cuestionamiento del Congreso y quería que fuesen los vicepresidentes de su oficina Rob Manfred y Sandy Alderson.
Si todo está claro y no hay problema, apuntaba, por qué, temer a un cuestionamiento del Comité de Reformas Gubernamentales.
Yo soy de lo que está completamente de acuerdo con ese Comité, cuando señala que «los peloteros no tienen que estar por encima de la ley».
Lo que en definitiva pienso que se debe hacer es, comenzar a establecer responsabilidades y que caigan hasta las frutas nuevas, porque el béisbol debe limpiar su nombre de una vez y por toda.
Mientras tanto, el miedo es generalizado aquí, cuando se menciona la palabra esteroides.
Nos vemos en Santo Domingo, desde donde prepararé varias entregas.
