Hoy 
POR HÉCTOR GARCÍA
El gerente general de los Mets, el dominicano Omar Minaya, es un trabajador incansable y por ende un triunfador, pero creo que no está en el camino real en la estructuración de la novena Queens. Minaya, se fajó de lleno y logró la contratación de Pedro Martínez, pero que yo recuerde, jamás pensó en la combinación de este gran lanzador, me refiero al receptor Jason Varitek, quien estaba en el mercado.
Resulta que dentro desde mi óptica yo no veo receptor en los Mets para Pedro Martínez. Que nadie me hable de Mike Piazza. Cuando Pedro, esté encendido, que es casi siempre, Piazza, no apara una. Ese es un grave problema.
En los Mets, no hay primera base, tampoco jardineros en los extremos y Mike Cameron, está lesionado.
¿Qué les conviene más a los Mets, entregar un dineral a Carlos Beltrán, o negociar un receptor y un outfilder que pueda dar 30 jonrones? Esto tendrá que contestarlo Omar Minaya, dentro de algunos meses.
Para mi Carlos Beltrán, no es la solución y aún llegando a Queens, a los Mets, le falta mucho para poder ser competitivo. Por eso no me hago muchas ilusiones con Pedro Martínez, quien además tiene que acostumbrarse a pararse y a cuidarse en el
home, a correr las almohadillas y tocar la pelota, cosas que no hace desde que era más joven.
Si ese conjunto no lo estructuran de otra manera, a mí el fracaso de los Mets, no me sorprenderá.
EL BÉISBOL CUBANO
Leí en un diario cubano la siguiente historia y la voy a transcribir textual, para informar a los que no tienen acceso a los periódicos del hermano país.
Cito: «Cuba celebró el aniversario número 130 del primer partido oficial de béisbol en la isla, que se disputó el 27 de diciembre de 1874 en el estadio »»Palmar de Junco»» en Matanzas.
De esta forma, Cuba se convirtió en el segundo país donde se jugó a la pelota, después de Estados Unidos, según destacó la prensa local.
El desafío se disputó entre las novenas de La Habana y Matanzas, y fue ganado por la primera con el desproporcionado marcador de 51 carreras a nueve.
Sin embargo, sobre la introducción del béisbol en Cuba existen dos versiones históricas encontradas, una de ellas que se remonta incluso unos 10 años antes de la citada fecha.
La primera versión señala que fueron marinos estadounidenses quienes introdujeron el béisbol en 1864, en la propia provincia de Matanzas.
La segunda hipótesis sostiene que fueron los hermanos cubanos Nemesio y Esteban Guillot y su compañero Enrique Porto, quienes introdujeron en La Habana ese mismo año de 1864 la
práctica de lo que es hoy el deporte nacional en Cuba.
Estas tres personas estudiaban en un colegio de Alabama en Estados Unidos, donde aprendieron a jugar la pelota, en un momento en que ni siquiera en ese país se conocía de manera extensa». Cierro la cita.
Lo cierto es que nunca hay certeza con relación al inicio del béisbol en ningún país del continente.
EN REPÚBLICA DOMINICANA
Si usted lee el libro de reciente publicación (El Béisbol en República Dominicana, Crónica de una Pasión), se dará cuenta de que tampoco está claro de cuando se inició la pelota en nuestro país.
Por cierto hay que resaltar el gran aporte que hace este libro, no solo a los que vivimos del deporte, sino a la cultura en sentido general.
Mis felicitaciones Orlando Inoa, Héctor J. Cruz y Enrique Rojas, por ese extraordinario trabajo y un saludo a Verizon, por el apoyo para que este trabajo sea una realidad.
