WASHINGTON.EFE. La ciudad de Nueva York intentó ayer recuperar la normalidad tras una fuerte tormenta de nieve que obligó a cancelar centenares de vuelos el viernes y que amenaza con volver a hacer estragos a noche.

La tormenta, que se originó en el oeste del país, amenaza con dejar cortes de luz en el norte de EE.UU. y vientos huracanados en algunas áreas del estado de Washington.

Se espera que la tormenta continúe y se espera que cause nuevas acumulaciones de nieve en la ciudad de Nueva York, en Nueva Jersey y Pensilvania, antes de desplazarse hoy hacia el Atlántico.

El meteorólogo Steve Corfidi, del Centro de Predicción de Tormentas en Oklahoma, dijo que se trata del mismo frente que en los últimos días ha causado nevadas insólitas en lugares como Las Vegas o Nueva Orleans. Agregó que la tormenta podría dejar  en torno a treinta centímetros de nieve en algunas zonas.

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Toman medidas para palear nieve

Se trata de la primera nevada fuerte de esta temporada, por lo que las autoridades han puesto en marcha diferentes medidas para tratar de mitigar sus efectos, entre ellos, la disposición de hasta 193,000 toneladas de sal para esparcirla por carreteras y aceras.

Bloomberg mueve los mecanismos necesarios

El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, ha dicho que se han movilizado las máquinas quitanieves ante las fuertes nevadas que pueden caer.