ILIGAN. AFP.  Más de mil personas han perdido la vida a causa de la tormenta tropical Washi, que arrasó el sur de Filipinas, según el último balance comunicado por los servicios de socorro. La tormenta tropical, que azotó la isla de Mindanao el viernes por la noche, ha dejado 957 muertos y 49 desaparecidos, según el último balance del Organismo Nacional de Prevención de Catástrofes. La agencia contabilizó el lunes 662 muertos y 82 desaparecidos, mientras que el balance de la Cruz Roja era de 713 víctimas y 563 personas desaparecidas. El balance aumenta a medida que aparecen los cuerpos arrastrados por el agua.

Las ciudades portuarias de Cagayan de Oro e Iligan han sido las más afectadas con 579 y 279 víctimas anunciadas, respectivamente.

Muchas víctimas eran habitantes de los tugurios situados en la costa sorprendidos cuando dormían y arrastrados por las olas. Pueblos enteros han sido arrasados por las inundaciones y carreteras y puentes han sido destruidos, dejando a unas 47.000 personas en la calle en plena noche sin ropa ni alimentos. Los filipinos están afectados cada año por una veintena de tormentas tropicales o tifones. Pero la mayoría sacuden al norte del país.