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LA HABANA, Ago 28 (AFP) – Una debilitada tormenta tropical Ernesto azotó con lluvias este lunes a Cuba, donde podría recuperar fuerza y luego dirigirse al sur de Florida convertida nuevamente en huracán, un año después de la devastación del ciclón Katrina en Estados Unidos.
«Hay que decir que Ernesto está débil (…) no es ni la sombra de lo que era, simplemente las montañas de Haití y ahora la interacción con las montañas de la parte oriental (de Cuba) han hecho que no se desarrolle», señaló este lunes el jefe del Centro de Pronóstico del Instituto Cubano de Meteorología (IMC), José Rubiera al telediario local.
El experto añadió que «afortunadamente para nosotros tenemos que enfrentarnos a un sistema mucho más debilitado (…) que pudiera todavía ganar un poco más en fuerza al llegar el centro a tierra, pero ya no le queda mucho, ya está bastante cercano» a la isla.
Rubiera subrayó que el frente más intenso de Ernesto impactaría en horas de la mañana la costa sureste de Cuba por un punto entre las provincias de Santiago de Cuba y Guantánamo, y que el «único factor importante que pudiera haber con esta tormenta tropical sería la lluvia».
Decenas de miles de cubanos -60.000 en Santiago de Cuba y 15.000 en Guantánamo- fueron evacuados a lugares seguros sobre todo en las provincias del este de la isla, en algunas de las cuales llovía ininterrumpidamente la mañana de este lunes.
La Defensa Civil nacional mantenía este lunes la fase de Alarma Ciclónica en diez de las catorce provincias de Cuba, entre ellas Guantánamo, Granma, Santiago de Cuba, Holguín, Las Tunas y Camagüey, todas en el este, así como para las centrales Ciego de Avila, Sancti Spíritus, Cienfuegos y Villa Clara y Matanzas.
Según el experto la tormenta tropical «podría atravesar la isla de un extremo al otro en 24 horas y salir al mar por las provincia de Camagüey o las Tunas».
En Estados Unidos, las autoridades de Florida (sur) decretaron el estado de emergencia ante la amenaza de la tormenta, que pese a haberse debilitado, creen que podría recuperar fuerza a su paso por las montañas al este de Cuba.
El gobernador de Florida, Jeb Bush, ordenó el estado de Emergencia ante lo que podría ser «una gran catástrofe».
La trayectoria prevista de Ernesto indica que podría cruzar Cuba, devastar a los cayos de Florida e ingresar en el Golfo de México, en el sur de Estados Unidos, aún traumatizado por la devastación del huracán Katrina un año atrás.
La posibilidad de que Ernesto gane intensidad en las próximas horas generaba la alarma en Cuba, devastada en los años 60 por el huracán Flora, que con un curso similar, dejó grandes pérdidas materiales y humanas.
Ernesto se convirtió en el primer huracán de la temporada en el Atlántico el domingo por la mañana pero horas después fue degradado a tormenta tropical debido a que sus vientos máximos sostenidos disminuyeron a 80km/h, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), con sede en Miami.
Sin embargo, Ernesto podría aterrizar en Florida el jueves convertido en un huracán de categoría 3, impulsado con vientos de 209 k/h, añadió el NHC.
Las autoridades advirtieron además que Ernesto podría golpear a la ciudad de Nueva Orleans y otras aledañas en la costa del Golfo de México, devastadas por el huracán Katrina, que dejó 1.500 muertos y centenares de miles de personas sin hogar.
Cuba, que posee un efectivo y experimentado sistema de enfrentamiento a ciclones, sufrió el pasado año cinco ciclones, dos en forma directa y tres indirecta.
En junio, la tormenta Arlene afectó la isla, preludio del gran golpe que le propinó en julio el huracán Dennis, que afectó a 10 provincias, dejó 16 muertos y daños por 1.400 millones de dólares.
