CANTON. Fuertes tormentas con tornados castigaron varios pueblos de la zona de East Texas, dejando al menos cuatro muertos, decenas de heridos y muchos vehículos volcados, árboles retorcidos y casas dañadas, informaron las autoridades el domingo.
Además de Texas, también hubo tormentas en algunas áreas de la región sur y centro, con fuertes vientos, tormentas y lluvias torrenciales, dejando al menos seis muertos en tres estados. En Arkansas, una mujer de 65 años murió el sábado cuando el viento empujó un árbol a su casa.
En Missouri, una mujer de 72 años murió ahogada cuando la corriente de un río desbordado se la llevó dentro de su auto, pese a que su esposo trató de salvarla. Las tormentas se dirigían el domingo al este, hacia Mississippi y Alabama.
En Texas, equipos de rescate estaban revisando casa por casa el domingo, un día después de que tormentas dejaran un sendero de destrucción de 56 kilómetros (35 millas) de ancho en el condado de Van Zandt, dijo la alcaldesa de Canton Lou Ann Everett. La zona, mayormente rural, queda a unos 80 kilómetros (50 millas) al este de Dallas.
«Es doloroso y terrible», dijo Everett a reporteros durante una conferencia de prensa.
Televisoras locales mostraron árboles desarraigados y vehículos volcados en carreteras rurales, junto a casas destruidas. Las tormentas volcaron camionetas pickup en una agencia concesionaria Dodge en Canton y destrozaron el negocio.
Everett dijo que las autoridades han confirmado la muerte de cuatro personas, una menos de la que habían reportado antes, pero advirtieron que esta «es una situación que está pasando muy rápido y que podría haber cambios». Los socorristas estaban usando perros para ver si es que «alguien había quedado atrapado y necesitaba ayuda, o estaba en una situación peor», añadió.
En tres hospitales se atendieron a 56 personas y seis seguían hospitalizadas el domingo por la mañana, dos de ellas en condición crítica, dijo la portavoz del Sistema de Cuidado Médico Regional ETMC Rebecca Berkley.
Los funcionarios exhortaron a la gente a mantenerse alejada de la zona. Socorristas laboraban en medio de fugas de gas y falta de electricidad, dijo el juez Don Kirkpatrick, director general del condado. El viento también derribó vallas, provocando que el ganado de los ranchos del área quedara libre.
«Es una situación peligrosa la que hay allá afuera», dijo Kirkpatrick.