La Caleta, Boca Chica. Varias guaguas del transporte público, de la
Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA), carros del concho y
privados, han resultado con cristales destruidos, a consecuencia de
piedras y palos lanzados por elementos desconocidos que en horas de la
noche, se ubican en la Marginal de la autopista de Las Américas.
Personas afectadas por las acciones de los delincuentes, entre ellos
Marcial Capellán, Luis Duran Mendoza, Víctor Herminia de los Santos y
Ana Josefina Reyes, narraron que las acciones se producen después de
las nueve de la noche en los lugares conocidos como Los Molinos, La
Llave, el Pez y en las cercanías del Hipódromo Quinto Centenario.
Capellán y Herminia de los Santos dijeron que se dirigían desde Boca
Chica a sus respectivas residencias del sector Los Frailes en el
kilometro once de la autopista de Las Américas y que en el lugar
conocido como La Llave, fueron atacados a pedradas, resultando los
cristales de sus vehículos destruidos.
«Pero horas antes de la agresión contra nosotros, los desaprensivos
habían agredidos a dos guaguas del transporte público, una de ellas de
la Oficina OMSA», manifestaron los denunciantes quienes demandaron de
la jefatura de la Policía Nacional que redoble la vigilancia en la
zona.
Ambos afirmaron que los agentes que esporádicamente recorren en
motocicletas la Marginal de Las Américas en horas de la noche, se
empeñan más bien en molestar a los parroquianos, conductores y
ocupantes de vehículos, que trabajar por la protección y seguridad de
las personas.
De acuerdo a denuncias, también en el tramo comprendido entrada del
aeropuerto Las Américas e Instituto Tecnológico Las Américas (ITLA),
elementos desconocidos colocan obstáculos en la autopista para
provocar accidentes de vehículos y atracar a sus ocupantes.
«No son ni uno, ni dos ni tres, los casos que se han producido en ese
tramo donde hasta pedazos de destartalados vehículos, han sido
colocados en la vía, para que la gente choque con ellos y cometer así
sus fechorías», dijeron personas conocedoras de la situación que viven
en la Villa Panamericana.