El superintendente de  Salud y Riesgos Laborales (SILSARIL), Fernando Caamaño, informó ayer que a partir del primero de septiembre alrededor de 160 mil trabajadoras que ganan salario mínimo comenzarán a  recibir el subsidio por maternidad  lactante.

Explicó que cada mes se beneficiarán entre 13 y 15 mil trabajadoras. El subsidio se otorgará  durante un año a cada beneficiaria.

Aclaró que los beneficios no alcanzan a las empleadas que devengan más de tres salarios mínimos.

Al participar en el almuerzo del Grupo de  Comunicaciones  Corripio, dijo que  el monto del subsidio no es aplicable a las empleadas que devengan sueldos elevados.

“Ya tenemos los procedimientos que van a normatizar la entrega del subsidio a todas las afiliadas al sistema que, a través de su empleador, notifique su condición de gestación, de embarazo y la fecha próxima de alumbramiento”.

Sostuvo que tres meses de salario serán   asumidos por el sistema y aunque no se pague, el sistema  hará un crédito por esos tres meses.

Explicó que el pago del subsidio será acreditado todos los meses a la cuenta del empleado como lo establece la ley.

Indicó que en ese caso aplica el régimen de solidaridad mediante reparto simple, porque el 33 por ciento que se va a cotizar a partir de agosto se va a  aplicar en septiembre.

De su lado, el tesorero de la Seguridad Social, Henry Sahdalá, dijo que el subsidio lo crea el propio sistema y el monto contemplado en la Ley es de RD$53,500.

Ambos funcionarios destacaron la importancia de esa disposición que contribuirá con la alimentación de los hijos recién nacidos de las trabajadoras durante un año.

En el pasado sistema las empleadas  privadas que tenían hijos durante su contrato de trabajo recibían un subsidio durante un año. El subsidio se había descontinuado y ahora el monto será mayor.

Modelo atención primaria se dificulta
La directora ejecutiva del Seguro  Nacional de Salud (SENASA), doctora Altagracia Guzmán Marcelino, afirmó que el servicio de atención primaria en el régimen contributivo ha tenido dificultades en su implementación por la actitud de la Asociación Nacional de Clínicas Privadas y el Colegio Médico Dominicano.

Aseguró que en el régimen subsidiado se ha avanzado bastante y no se dan los mismos problemas que en el contributivo.

“En el régimen subsidiado un millón 200 mil afiliados nosotros (SENASA) le asignamos una unidad de atención primaria de la red pública”.

Dijo que cuando SENASA entrega la carta que le acredita con los derechos del aseguramiento en salud, inmediatamente se le dice qué unidad de atención primaria le toca.

“Esa unidad de atención primaria tiene el deber de referir al paciente si padece de enfermedades como la hipertensión arterial y si es un niño que tiene que ser vacunado se hace ahí mismo.

Aclaró que esa actitud no es porque ellos quieran, sino porque  la formación de los médicos es solamente para ser especialistas, lo que constituye un problema para el modelo.

Consideró que los estudiantes de medicina antes de llegar a la universidad piensan en el estudio de una especialidad y no en la medicina general.

“A ese modelo hay que comenzar a hacerle un trabajo desde las universidades para evitar los problemas que se registran ahora con el sistema de atención primaria”.

 Dijo que el sistema debe resolver ese problema, incluyendo a  las Administradoras de Riesgos de Salud que reciben un monto por los programas de promoción de la salud y prevención de las enfermedades.

Guzmán Marcelino sostuvo  que siempre hay un sector que se opone a los cambios, pero que  hay que cumplir con los mandamientos de la  legislación.

Indicó que se necesita regular a las Administradoras de Riesgos de Salud y a las prestadoras de salud que son las dos reguladas.