POR PAPPY PEREZ 
SANTIAGO.- Un romanticismo especial rodeaba al béisbol dominicano cuando el 11 de enero de 1948 pereció en las montañas de Yamasá, Río Verde, el formidable grupo de peloteros que conformaban el equipo Santiago.

El romanticismo fue especial también ayer, 57 años después, cuando con nostalgia deportistas de Barahona, el último destino del equipo, y Santiago , rindieron culto a las memorias de los fallecidos, cuyos recuerdos aun provocan lágrimas de sus familiares. 

 El sol luchó para salir de un cielo encapotado, y dio su bendición a la actividad que cada año organiza la Asociación de Cronistas Deportivos de Santiago, y que ayer contó con la presencia del secretario de Deportes, Felipe Payano, del síndico municipal de Santiago, José Enrique Sued, el síndico de Moca, Rubén Lulo Gitte, Winston Llenas ,presidente de las Aguilas, Porfirio -Popo- Veras , comisionado de béisbol, y numerosas delegaciones deportivas.

Una nutrida comitiva de Barahona se hizo presente , liderada por Bienvenido Matos Pérez, presidente de Unión Deportiva de la provincia, Héctor Pérez López, secretario del Ayuntamiento, y los ex -jugadores Anselmo Petterson y Wilfredo Pagan, miembros del equipo de Barahona que se enfrentó al de Santiago, así como el ex -pelotero Rafael-Cacata-Cabrera.

El secretario Municipal del ayuntamiento de Barahona leyó una resolución de la sala capitular, declarando visitantes distinguidos , de manera póstumo a los 32 deportistas. Y Matos Pérez dijo un encendido discurso.

La tragedia representó un abrupto rompimiento del apasionante béisbol aficionado de entonces, que se enfrentó con una amarga realidad al perder a 18 de sus mejores exponentes .

Los que hacen historia coinciden en señalar que entonces se jugaba por mística, por amor al deporte y el batir de las manos en señal de aplauso era el premio deseado . 

Eran increíbles atletas según, las crónicas de la poca, que destacaban además por la gran entrega a la causa de su equipo

El pase de lista fue emotivo , fueron llamados por Hilarión Izalguez, cronista deportivo local, que citó  al poeta Becker y su frase «que solos están los muertos», para destacar que los del 11 de enero no lo han estado y que por 57 años son recordados con el mismo calor, y el mismo dolor por la sociedad deportiva. 

Para ser más gráfico Izalguez llamó a los 32 caídos y simultáneamente entraron 32 equipos de béisbol infantil , cada uno llevando el nombre de un deportista de los fallecidos. As representados entraron al campo santo Aquiles Martínez», Loro Escalante, Bombo Ramos, Chino Alvarez, Grillo A, Bebecito del Villar, Toñito Martínez», Mino Estrella, Sancho Tatis, Papiro Raposo, Papito Lucas, Antonio Devora, Boquita Jiménez, Fernando Valerio, Yeyo Hernández, Pepillo Aybar, Puchulan Rivera y Tatis Rodríguez».

También los que acompañaron el equipo en su viaje, los doctores Belarminio López, Luciano Hernández y Arnaldo Cabral, el periodista Luis Luque, Manuel Tejada, Virgilio de Peña, Miguel Albaine, Enrique Diloné, Enrique Henriquez, Francisco Collado, Elpidio Victoria, Carlos Manuel Rodríguez, Ramón María Hernando y José del Carmen Ramírez.

El presidente de la ACDS Tuto Tavárez agotó un turno en el acto, para introducirlo y agradecer la presencia de los invitados, también lo hizo el secretario de Deportes ,Felipe Payano para destacar la necesidad de que » los deportistas se unan para alcanzar el éxito del deporte nacional».

El soneto del poeta R. Suarez Vásquez fue declamado por el veterano locutor y narrador Ramón de Luna

La joven cronista deportiva Raquel Infante leyó el panegírico , destacando con gran énfasis, el gran impacto que provocó en Santiago y el país la tragedia.

«Sus cuerpos destrozados o calcinados tras el accidente no han impedido que sus hazañas se mantengan perennes en nuestras mentes», dijo.

«La nostalgia que produjo el lamentable accidente aéreo en que ellos perdieron la vida , hoy gravita con intensidad en los corazones de quienes amamos el deporte y disfrutamos la gloria que da el pueblo a los grandes deportistas», dijo.

Infante que lució nerviosa , pero firme en la lectura del panegírico afirmó que Santiago , los familiares de las víctimas» y el país sufrieron el golpe más rudo que puede dar la muerte con este accidente.

De su lado el sacerdote César Hilario, a quien tocó el responso destacó el valor humano del reconocimiento y pidió paz para todos .

«Desde lo más profundo del corazón pedimos a Dios paz eterna para estos deportistas , que recordamos hoy con la misma pasión que ellos despertaron en las multitudes, con su juego en el estadio», dijo.