La muerte de once personas al precipitarse al mar Caribe un minibús cargado de pasajeros, la tarde del viernes, es un suceso doloroso  y que debe mover a reflexión. Aparte de que el hecho suma cifras al abultado registro estadístico de decesos causados por accidentes de tránsito, debe colocarnos en  la perspectiva de esforzarnos por mejorar los medios de prevención de percances de carretera y mejorar la seguridad de conductores, pasajeros y transeúntes.

Al margen de las causas del accidente que nos sirve de referencia, hay que insistir en que se establezca una efectiva supervisión de las condiciones  mecánicas y estructurales de los vehículos de motor, sobre todo aquellos dedicados al transporte masivo de pasajeros. Los restos del minibús del accidente de este viernes muestran uno de los precursores por excelencia de accidentes de tránsito: neumáticos lisos y en muy mal estado.

Es oportuno reafirmar nuestro reclamo de que la denominada “Revista” deje de ser un simple instrumento de captación de ingresos fiscales y sea transformado en un medio para la supervisión técnica de las condiciones de funcionamiento de los vehículos de motor en general, con especial énfasis en los que transportan pasajeros y carga. Nuestro pesar por el accidente del viernes y nuestra persistencia en la prevención.

Proclama electoral

La Junta Central Electoral ha hecho la proclamación formal del proceso que debe desembocar en las elecciones congresionales y municipales del 16 de mayo de este año. Se trata de un formalismo de ley que ratifica la vigencia de una campaña política que en los hechos es de vieja data. Pero se trata de la proclamación para unas elecciones en las que hay novedades importantes que necesariamente deben ser del dominio del personal que labore en el desarrollo de las votaciones.

Por las particularidades que estrenaremos en mayo, es necesario que el personal electoral esté suficientemente preparado y que todos los políticos, sobre todo los delegados de mesas electorales, estén en capacidad de lidiar con cada y la forma de manejarla en el contexto de lo que dispone la Ley Electoral vigente. Nuevamente hay que insistir en que la Junta debe recibir  a tiempo los recursos que necesita para hacer su trabajo sin prisas ni sobresaltos.