Transformación electoral

Transformación electoral

Por Johnny Marcelo Rivera Báez

En la preparación para las elecciones presidenciales, congresuales y municipales de 2024, la Junta Central Electoral dio pasos importantes hacia la modernización del proceso electoral. Desde la implementación de tecnología hasta la mejora de los procedimientos de escrutinio, estas decisiones no solo buscaban garantizar la transparencia, sino también hacer que el voto de cada ciudadano cuente, desapareciendo la funesta y errática consigna de que acta mata voto. A través de diferentes resoluciones, la JCE ajustó y optimizó el uso de equipos para la digitalización y transmisión de resultados, marcando un antes y un después en la historia electoral de la República Dominicana.

En su Resolución preliminar No. 34-2022, dispuso que la votación y el escrutinio serían manuales, mientras que la digitalización, el escaneo y la transmisión de los resultados se realizarían desde los recintos electorales mediante un equipo denominado EDET, para las elecciones presidenciales, congresuales y municipales de 2024. Esta resolución fue modificada por la No. 10-2023. Posteriormente, la Resolución No. 74-2023 introdujo el uso de EDET en todos los colegios electorales, utilizando laptops y multifuncionales, reemplazando los escáneres utilizados en las primarias de 2023. Destaco como relevante del proceso de implementación del equipo la anticipación con la que comenzaron las discusiones, aproximadamente 2 años antes del proceso electoral y que su aplicación fue fruto de consensos alcanzados entre la JCE y los actores políticos.

Puede leer: Promover el pensamiento crítico: el desafío de la educación formal

La digitalización, transmisión y escaneo de los resultados desde cada colegio a través del EDET fue clave en el éxito del proceso electoral. Permitió resolver problemas históricos relacionados con el conteo y registro manual de datos, que podían ser propensos a errores humanos. Esto garantizó que los datos fueran precisos y confiables desde el inicio; cualquier error detectado durante el escrutinio pudo ser corregido de inmediato en el propio colegio electoral, bajo la supervisión de los actores involucrados. Asimismo, facilitó una transmisión rápida y segura de los resultados, asegurando la integridad de la información.

El EDET implicó, por primera vez, la implementación de tecnología en el 100% de los colegios electorales durante las elecciones de febrero (16,857 colegios) y mayo (18,292 colegios, incluyendo los del exterior). Se procesó el 100% de las relaciones de votación, sin necesidad de anular ningún colegio electoral. Además, este buscaba eliminar los descuadres en las relaciones de votación, que a nivel nacional alcanzaban más del 30%, y cumplió con su cometido: todas las relaciones estaban cuadradas, por lo que no se tuvo que instalar mesas de validación en las Juntas Electorales para resolver los descuadres. De este modo, el descuadre se eliminó por completo, facilitando que las juntas electorales llevaran a cabo su proceso de cierre del cómputo en tiempo récord. Consecuentemente, la JCE, a pesar de tener 30 días de conformidad con la Ley para emitir la totalización de los resultados, lo hizo en solo 5 días.

El uso de la EDET permitió que las agrupaciones políticas y la prensa recibieran la imagen y los datos de la relación de votación (comúnmente conocidas como actas de escrutinio) de forma conjunta y al mismo tiempo que la Junta Central Electoral. En 34 procesos anteriores [23 elecciones presidenciales (incluyendo 15 generales, 5 en solitario y 3 junto a legislativas; 4 elecciones congresuales y municipales de medio término; 2 elecciones municipales y 3 elecciones pasa asamblea constituyente], solo recibían las imágenes de la relación de votación, y después, una vez que las Juntas Electorales digitalizaban el contenido, recibían los datos.

Facilitó una generación ágil y continua de los boletines en las Juntas Electorales, reflejada en la presentación de los boletines nacionales de la JCE, logrando con ello definir tendencias en los primeros boletines. Cerca del 98% de las relaciones de votación fueron recibidas el mismo día de las elecciones y el resto antes de las 2:00 am del siguiente día (tanto en febrero como en mayo), todas cuadradas y listas para ser incluidas en los boletines.

Igualmente, relevante es señalar que los programas y el equipo fueron auditados antes, durante y después de su utilización para garantizar la seguridad y confiabilidad del mismo. Estas auditorías, realizadas en febrero y mayo, fueron llevadas a cabo por un equipo de expertos internacionales. Además, los EDET se pusieron a disposición de las organizaciones políticas en un espacio habilitado dentro de la JCE, para que verificaran directamente su robustez. Varios partidos acudieron con expertos en seguridad, bases de datos, sistemas operativos y redes para validar que el equipo ofrecía todas las garantías para un proceso confiable y para recibir información especializada por parte de los técnicos de la JCE, lo que subraya -de nuevo- la apertura de la JCE para dar confianza a los actores e integridad al proceso.

Lo anterior reseña que la implementación del EDET implicó 8 avances que modificaron la administración y gestión electoral: 1. El uso de tecnología en el 100% de los colegios electorales; 2. El procesamiento del 100% de las relaciones de votación; 3. La eliminación de descuadres en las relaciones de votación; 4. La transparencia simultánea en la recepción de datos; 5. La generación ágil y continua de boletines; 6. La recepción en tiempo récord de las relaciones de votación; 7. La auditoría previa y continua de la tecnología; 8. La validación técnica por los partidos políticos. Cabe señalar que la conformación de los kits con las EDET se llevó a cabo con la participación de observadores de los partidos políticos y con procesos de producción y control de calidad certificados por las normas ISO 54001, ISO 9001, ISO 27001 y ISO 22301.

Estos hitos evidencian que la decisión del pleno de la JCE de implementar los EDET en todos los colegios electorales, junto con la tecnología especificada en la resolución 74-2023 (laptops y multifuncionales), fue un acierto que ha marcado un punto de giro en los procesos electorales, no solo en la República Dominicana, sino en toda la región. Esta evolución tecnológica y de administración fortalece la transparencia y la confianza en el sistema electoral. ¡El futuro debe conducirnos a continuar explorando prácticas que garanticen elecciones cada vez más justas, eficientes y accesibles para todos y todas!