Después de tres meses consecutivos durante los cuales los países emergentes han registrado salidas de capitales netas, los primeros cálculos del Instituto Internacional de Finanzas dejan entrever que al final de octubre se podría haber producido una entrada neta de capitales en estos países. Esto quiere decir que tras las turbulencias del verano llega cierta calma a estos mercados.

El paso del tiempo dirá si octubre es un mes de pausa simplemente o es el inicio de un ciclo más tranquilo, afirma una publicación de El Economista.es.

Según el último informe publicado por ese instituto, «los mercados emergentes habrían recibido influjos de capitales netos por valor de 13.900 millones de dólares, lo que supone el primer mes de entrada neta de capitales desde junio».

Esto da un descanso a los bancos centrales de los países que habían comenzado a tener problemas con las reservas de divisas, y es que todas las regiones emergentes parecen haber sido partícipes de esta cifra, aunque es Asia la que se ha llevado casi todo este influjo de capital.

«De los 13.900 millones de dólares, 6.200 millones son entradas en los mercados de acciones y 7.700 millones en los de bonos (lo que supone el mejor mes para los flujos de deuda desde enero). Los países emergentes de Asia, con 9.000 millones de entradas netas de capital, lideran las regiones. Este es el mejor dato para Asia desde abril», señala el informe.

El punto negativo de este mes se centra en México, que registró salidas de capital por valor de 3.800 millones de dólares en el mercado de deuda soberana. Esta mejora se debe «a los mensajes pesimistas de la Fed (que podría retrasar la subida de tipos) y la reducción de la volatilidad en los mercados financieros de China».

Tras unos meses con fuertes correcciones y algunos rebotes en los índices de China, parece que la situación se ha estabilizado en las últimas semanas. La promesa del Gobierno chino de que no habrá más devaluaciones del yuan también parece haber calmado a los inversores.

Aunque todos estos datos de octubre son un pequeño paso hacia adelante, la revisión de los datos de los pasados meses «confirman que el tercer trimestre de 2015 fue el peor desde los momentos más turbulentos de la crisis financiera global, en lo que a flujos de inversión se refiere».

En agosto salieron unos 14.600 millones de dólares de los emergentes, de los cuales 12.600 millones pertenecieron a venta de acciones y 1.900 millones debonos. En septiembre comenzó a suavizarse esta huida de la inversión.

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Huida inversión

En septiembre se esfumaron 7.800 millones de dólares, 4.200 millones en acciones y 3.600 millones en deuda o bonos. Aunque el contexto sigue siendo pesimista para los países emergentes, se puede decir que «hay signos de vida después de los malos datos de tercer trimestre del año 2015». Habrá que esperar a que estos hechos positivos se confirmen cuando entre noviembre, aunque todo hace indicar que ha habido entradas de capital netas.