Traslado a EEUU de soldado que mató a 16 afganos suscita ira de Hamid Karzai

Traslado a EEUU de soldado que mató a 16 afganos suscita ira de Hamid Karzai

WASHINGTON, (AFP) – El soldado estadounidense acusado de matar a 16 civiles afganos, cuya identidad fue revelada este viernes, fue transferido a una prisión en Estados Unidos pese a la ira del presidente afgano, Hamid Karzai, quien estimó que la actitud de Washington «no puede seguir tolerándose».

El soldado, sargento Robert Bales, de 38 años, casado y padre de dos hijos, llegó el viernes por la noche a la cárcel militar de Fort Leavenworth, Kansas (centro), en un vuelo desde Kuwait, informó la prensa estadounidense.

El pasado domingo 11 de marzo, el soldado mató a 16 civiles afganos en Kandahar, sur de Afganistán, atizando las tensiones entre Kabul y su aliado estadounidense, que dirige la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) de la OTAN. Su abogado, John Henry Browne, había dicho antes estar «preocupado» por su «estado de ánimo» tras hablar con él por teléfono.

Luego de que funcionarios de Estados Unidos divulgaron este viernes la identidad del soldado, varias páginas de internet con fotografías o artículos sobre Bales, algunas del Departamento de Defensa, fueron borradas. El traslado de Bales suscitó la ira del mandatario afgano Hamid Karzai y enfrió aún más las ya complejas relaciones diplomáticas entre Washington y Kabul.

«El gobierno afgano no recibió ninguna cooperación por parte de Estados Unidos para que se le entregue al soldado estadounidense», sospechoso de haber matado a los civiles, deploró Karzai ante la prensa después de haber recibido en el palacio presidencial a una treintena de familiares de las víctimas de la matanza del domingo. «Esto dura desde hace demasiado tiempo. Este comportamiento no puede seguir tolerándose. No reclamamos dinero, queremos justicia», añadió. «Se trata de un acto intencionado perpetrado por soldados estadounidenses», subrayó a propósito de la matanza.

«Queremos que nos respondan cuando les preguntamos por qué han matado a civiles y queremos que sean castigados», agregó. Las autoridades afganas han reclamado que el culpable de la matanza sea juzgado públicamente en Afganistán. Pero Washington lo trasladó primero a una base estadounidense en Kuwait y dijo que sería juzgado por un tribunal militar estadounidense.

 El abogado del soldado descartó la posibilidad de que fuera juzgado en Afganistán. Pese a estos factores de discordia entre Washington y Kabul, Obama y su homólogo afgano reafirmaron el viernes en conversación telefónica el objetivo de retirar las fuerzas internacionales de Afganistán a fines de 2014, según anunció la Casa Blanca.

El jueves, Karzai había indicado en un comunicado que Kabul planeaba asumir desde 2013 la seguridad en el país en reemplazo de las fuerzas de la OTAN (ISAF) y no a fines de 2014 como estaba previsto hasta ahora. Pero según un comunicado de la Casa Blanca, ambos presidentes reafirmaron que «las fuerzas afganas acabarían el proceso de transición y asumirían la total responsabilidad de la seguridad en el conjunto del país a fines de 2014».

El ejército de Estados Unidos asegura que el sargento actuó sólo, pero varios familiares de las víctimas recibidos el viernes por Karzai afirmaron que entre 15 y 20 soldados estadounidenses estaban implicados en la matanza. Pero no pudieron probar sus afirmaciones.

La masacre es el último de una serie de incidentes con soldados estadounidenses en Afganistán que han disparado las tensiones, ya de por sí importantes, entre Kabul y Washington. Estados Unidos -que invadió Afganistán a fines de 2001- dirige la ISAF, 90.000 de cuyos 130.000 soldados son estadounidenses.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas