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POR ARIDIO PERDOMO
PUERTO PLATA.- La fortaleza San Felipe, tradicional recinto militar que albergó el Octavo Batallón del Ejército Nacional en Puerto Plata, por disposición de la Procuraduría General de la República ha quedado bajo la administración y supervisión del Centro Nacional de Agentes Penitenciarios.
El recinto militar que albergó a los guardias de línea está bajo las directrices de los agentes penitenciarios, un cuerpo especializado que se encargará de la custodia de los reclusos que cumplen las penas impuestas contra ellos en los tribunales de justicia del país y que con este nuevo sistema moderno se busca devolverlos a la sociedad como entes productivos y no en peores condiciones como suele ocurrir por no recibir las atenciones adecuadas.
La licenciada Ibelka Villanueva, directora del Programa Penitenciario de Rehabilitación de los Reclusos en Puerto Plata, dijo que la cantidad de agentes bajo su mando irá aumentando en la medida que se organicen y se preparen en los cursos que constantemente impartimos con miras a incorporar nuevo personal penitenciario.
Reveló que unos 600 reclusos están recibiendo las atenciones diseñadas por el nuevo sistema penitenciario que cuenta con el respaldo económico y asistencia técnica de la Comunidad Económica Europea (CEE), la supervisión directa de la Procuraduría General de la República a través de la Dirección General de Prisiones, que dirige el general de la Policía Nacional, Juan Ramón de la Cruz Martínez.
De la Cruz Martínez, quien encabezó los actos de traspaso de administración y supervisión de la fortaleza San Felipe, informó que unos 120 agentes penitenciarios estarán albergados en el recinto militar para echar andar este nuevo sistema que se ha iniciado en Puerto Plata como un plan piloto que también se pondrá en marcha en otras cárceles del país custodiada por el Ejército Nacional.
A esta fortaleza serán trasladados presos que cumplen condenas en los recintos militares de Moca, La Vega y San Francisco de Macorís, incluso de acuerdo a lo informado por el general De la Cruz Martínez, la Dirección General de Prisiones ha recibido solicitudes de reclusos de otras cárceles del país que han pedido su traslado hacia Puerto Plata para incorporarse a los programas de rehabilitación y reeducación. Los beneficiarios con estos programas reciben enseñanzas de belleza, repostería, informática, corte y confección, elaboración del pan, sastrería, mecánica, creatividad, idiomas, entre otros cursos, oficios que les garantizan integrarse nuevamente a la sociedad completamente reeducados.
Para llevar a cabo estos programas se han instalado laboratorios, equipos modernos y otras facilidades que permiten a los reclusos estudiar sin problemas en horas de la mañana y la tarde.
Los miembros del Ejército Nacional que prestaban servicios en Puerto Plata, fueron enviados a los recintos militares de Santiago, Moca, La Vega, Mao, Valverde; Nagua y San Francisco de Macorís.
La fortaleza San Felipe fue entregada por disposición del presidente Leonel Fernández Reyna, mediante el decreto número 528-06, que establece que no sólo este recinto militar pasará a manos del nuevo sistema penitenciario, sino también otros que funcionan en el país.
