POR TANIA HIDALGO
El abogado Juan Antonio (Tony) Delgado, del consejo de defensa del coimputado Marcos Báez Cocco, continuó ayer por segundo día consecutivo exponiendo sus alegatos de cierre durante la fase final del juicio de fondo seguido a los imputados en el fraude del Banco Intercontinental (Baninter).

Durante su intervención, Delgado prosiguió analizando de manera técnica-legal  las acusaciones formuladas contra su cliente, tras advertir que lo primero que debe hacer el juzgador, al momento de decidir en torno a un caso puesto bajo su responsabilidad, es establecer si las pruebas recabadas son lícitas.

Reiteró sus críticas al denominado “informe Aurich”, así como a las autoridades monetarias y financieras del pasado gobierno por la forma en que “asaltaron” el quebrado banco para “fabricar” sus pruebas.   

De igual manera, Delgado señaló que el Ministerio Público y las autoridades monetarias se han extralimitado en cuanto a los aspectos de la acusación.

 “Los procuradores adjuntos y las autoridades monetarias han llevado al proceso una serie de hechos y alegatos que están fuera de la acusación que existe conforme a la Cámara de Calificación”, precisó.

Señaló que sólo pueden ser discutidos en el proceso los hechos y circunstancias acreditados en el auto de apertura a juicio dictado por la Cámara de Calificación el 10 de octubre de 2005.  También aquellos hechos que han sido objeto de ampliación de la acusación, al tenor del artículo 322 del Código Procesal Penal

Para reforzar este alegato, el jurista se auxilió del texto Introducción al Derecho Procesal Penal, de Alberto M. Binder, según el cual “la apertura consiste, fundamentalmente, en la constatación de las mínimas condiciones de validez del debate y en la fijación con precisión de su objeto.  Por tal razón, uno de los actos iniciales es la lectura de la acusación y del auto de apertura del juicio.  Estos son los dos instrumentos que “fijan” sobre qué se va a discutir.  Esta fijación del objeto del debate no es simplemente informativa; al contrario…, cumple una función principal, ligada a lo que se denomina “principio de congruencia”:   La sentencia sólo podrá versar sobre los puntos de hechos fijados en la acusación y el auto de apertura del juicio. El auto de apertura a juicio constituye el límite de su apoderamiento”.

El Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional es presidido por el magistrado Antonio Sánchez Mejía e integrado además por Pilar Rufino y Yissel Méndez.

Además  de Báez Cocco son procesados Ramón Báez Figueroa, Vivian Lubrano de Castillo, Luis Alvarez Renta y Jesús María Troncoso Ferrúa.

El grupo es acusado de un fraude ascendente a 55 mil millones de pesos en la entidad bancaria. El juicio de fondo en torno al caso se inició en abril del año pasado.

HECHOS PROBADOS

Asimismo, Delgado dio como hechos probados todas las evidencias testificales recreadas en su alegato de cierre por la defensa técnica de Ramón Báez Figueroa, integrada por Marino Vinicio (Vincho) Castillo, Juárez y Vinicio Castillo Semán y José Antonio Columna.

Durante su intervención Juárez recreó  fragmentos de los interrogatorios  practicados ante el tribunal a los testigos a cargo y descargo, entre ellos, José Américo Montaño Guillén, Príamo Concepción Rodríguez, Iván Ulises Moquete, Lionel Miguel Señor,   

Benita Castillo,  José Antonio Díaz, Ismael González Ramón Mola, Vicente Merán,  Giannina Estévez, Laura Guerrero, Freddy Dolores Pérez y Zaida Rosado.

Además, Angel García Berroa, Zunilda Paniagua,  Máxima Perdomo, José Lois Malkún, Luis Aurich, Julio Ortega Tous y Pedro Castillo.

ABUSO DE CONFIANZA

Durante su ponencia, Delgado comenzó a refutar de manera analítica y basado en jurisprudencias nacionales e internacionales las alegadas  infracciones cometidas por su cliente, iniciando con el abuso de confianza.

Definió a su defendido como un trabajador «leal» de la quebrada  institución bancaria.

Báez Cocco, ex vicepresidente ejecutivo de Baninter, está acusado de violar el artículo 408 del Código Penal que tipifica el abuso de confianza, así como de violar  el artículo 80, literales d y e de la Ley Monetaria y Financiera (183-02)  y el artículo 3, literales a, b y c,  4 y 18 de la Ley No. 72-02, sobre lavado de activos.

Según la acusación formulada por el Ministerio Público y la parte civil constituida estas disposiciones fueron violadas por el imputado al alegadamente adquirir o formar empresas con fondos de los depositantes, provenientes de préstamos ficticios.

Asimismo, por “extraer” fondos de los ahorrantes para destinarlos a adquirir bienes personales.

De igual manera, por alegadamente incurrir en la alteración, ocultamiento o desfiguramiento de datos, libros, estados de cuentas, así como por participar en la elaboración, aprobación y presentación de balances o estados financieros adulterados o falsos, para encubrir la situación de Baninter.

Según la acusación, Báez Cocco incurrió en una serie de operaciones irregulares por medio de memorandos confidenciales.

“La palabra “extracción” es reiteradamente utilizada por el Ministerio Público y los actores civiles, sin embargo nuestro legislador nunca emplea este término, como tampoco lo hacen la doctrina ni la jurisprudencia. “Extracción” es una expresión que la parte acusadora ha tomado prestada de otros ordenamientos jurídicos, que, evidentemente, entre nosotros no cabe”, puntualizó el abogado.

ELOGI A BAEZ ROMANO

Delgado  dedicó parte de su exposición para elogiar  a la familia de Ramón Báez Figueroa, quien figura también  en el expediente.

Dijo que Ramón Báez Romano, padre del imputado, pertenece a una de las familias más prestigiosas de este país, cuya fortuna ha sido el producto de un trabajo tesonero.

Faltan tres por concluir

Una vez finalice la exposición de Delgado el próximo lunes, faltarían por concluir los coimputados Luis Alvarez Renta, Vivian Lubrano de Castillo y Jesús María Troncoso Ferrúa, cuyos abogados son Eric Raful, Santiago Rodríguez, Salvador Catrain, Rolando de la Cruz Bello, Reynaldo Ramos, Rafael Cáceres y José Mora.

Hace varios días concluyeron  el Ministerio Público, a través de los procuradores adjuntos Francisco García y Danny Germán Villalona, así como la parte civil representada por Artagnan Pérez Méndez, Ramón Pina Acevedo, Francisco Alvarez, Carlos Salcedo, José Lorenzo Fermín, Tomas Hernández, Teobaldo Durán, Manuel Sierra y Francisco Benzán.

Problemas de salud

Pasada las 12:00 del mediodía, el tribunal decidió dar unos minutos de receso, a petición del exponente, que expresó al plenario que se sentía un “poco mareado” a consecuencia de una hipoglicemia.

Luego, la suspensión hubo que postergarla hasta las 2:30 de la tarde para dar tiempo a que el jurista se recuperara.

Sin embargo, al tratar de reanudar la audiencia a las 3:00 de la tarde, Delgado informó que su médico le había recomendado 48 horas de reposo, por lo que no estaba en condiciones de continuar su intervención en el día de ayer, lo que motivó que el proceso fuese recesado hasta el próximo lunes, cuando se espera que concluya su discurso.

La hipoglicemia se produce cuando el nivel de azúcar en la sangre  “baja demasiado”. Es decir que la cantidad de azúcar en la sangre no es suficiente para darle a las células del cerebro o a los músculos la energía que necesitan para funcionar.