En medio de un candente e intenso sol durante el día y un terrible y quemante frío en la noche, la brigada de Quisqueya Verde en El Tetero, Padre Las Casas, provincia de Azua, ejecuta su programa de reforestación con grandes éxitos en el mejoramiento de la calidad de vida de los participantes, al tiempo que recuperan las áreas degradadas pertenecientes al Parque Nacional José del Carmen Ramírez.

Isbelia, la responsable de la brigada, nos informa que ha plantado 29,520 arbolitos de las especies de pino criollo, penda y cedro, protegiendo al arroyo Caña Castilla, una importante fuente de agua que sirve para el consumo y fuente de la hidroeléctrica del pueblo. Este pintoresco pobladito de  38 viviendas tiene autonomía eléctrica, porque de su propia fuente hídrica saca la electricidad.

En Quisqueya Verde, donde trabajan más de 300  brigadas, las mujeres tienen la responsabilidad de dirigir a los demás miembros, constituyendo un ejemplo de claridad en el manejo del recurso, ya que éstas hacen anotaciones diarias de la asistencia al trabajo, de labores realizadas y conducción del grupo.

Isbelia, madre de tres niños, dice que está contenta “porque he conocido mucha gente y antes no hacía nada que no fueran los oficios de la casa. Nunca había hecho oficios que no fueran domésticos de mi casa, nunca había tenido un empleo. He conocido gente que me han enseñado este trabajo. Me invitaron a la inauguración del Día internacional de la Mujer (2010) en el parque Aniana Vargas  y tuve la oportunidad de montarme en un bote… fue una reunión con todas las mujeres de Quisqueya Verde que nosotras pensamos que era para trabajar, incluso llevé tenis pensando que iba  a campo alto, y cuando llegamos, allí teníamos que ir con tacones porque era una fiesta que nos tenía Jaime David, ahí fue que montamos un bote.” Montarse en un bote, estar en un lago  para una persona que pasa la vida sobre los 1500 metros sobre el nivel del mar, es ser protagonista de un espectáculo.

-Una mujer con 24 años, ¿cómo se siente dirigiendo a hombres que tienen dos veces tu edad?

-“Bien. Yo no había mandando a nadie, solo a mis hijos, tres hijos, y cuando a ellos les dijeron que iba a manejar esta brigada una mujer,  que iba a ganar más que los hombres trabajando menos… parecía que no iba a responder y ahora me siento bien con los trabajadores porque hacen lo que uno le diga”.

-Como tú dijiste que no ganabas nada, que no tenías entrada, ahora que recibes RD$7,000 y más todos los meses, ¿qué has hecho con ese dinero, se puede ver algo que hayas hecho?

“- He tenido un gran beneficio diría yo, porque mi sueño era tener una lavadora, porque ahora trabajo todos los días y tenía que lavar a mano en el río y pensé: voy a comprar una lavadora y la gente me decía que era un sueño porque a nosotros no nos iban a pagar y yo les dije que eso no me importaba que si lo hacíamos  otros se iban a beneficiar con nuestro trabajo, o sea que se iba a quedar aquí. Vino el primer sueldo de 7,000 pesos, después compré mi lavadora, un televisor y un DVD, un radio, vendí mi motorcito que ya no servía para completar y comprar un 110, compré una cama, ya que  mis hijos no duermen conmigo”.

 Como Isbelia, hay otros miembros  que pueden mostrar el progreso  como jornaleros de la brigada Quisqueya Verde en El Tetero: una cama, una bomba de fumigación, una mula y utilidades de la casa, son las cosas que Onorio Santos ha comprado, además que va a comprar una vaca y un cuadro de tierra. Odalis Santos ha comprado los platos de su casa, radio de música, unas cuantas gallinas y piensa comprar una vaca, un par de chivos y unas 20 tareas para sembrar pino. Félix Aybar compró una lavadora, un televisor, un motor y piensa comprar una “marrana” Su sueño: “Es que esta brigada continúe -dice Isbelia. Quiero ahorrar para comprar tierra y reforestarla, porque si tú pones la tierra a valer…, porque antes veíamos a los pinos como cosas de la naturaleza, sin ningún valor para nosotros, pero he podido ver que con pino cualquiera puede ser millonario.”