POR JOSE PIMENTEL MUÑOZ
El tratamiento moderno para  las personas diagnosticadas con trombosis de las venas profundas (TVP)  va desde medicinas orales o endovenosas  que promuevan un estado donde la sangre no coagule, hasta el uso de unos stents que se colocan en vasos sanguíneos de las piernas y que evitan el paso hacia el cerebro o el pulmón de coágulos de sangre.

El doctor Julio Baquero, jefe del departamento de radiología intervencionista del South Miami Hospital, explicó en Santo Domingo que “con la anticoagulación lo que hacemos es prevenir la propagación del coágulo detectado en la pierna  para que no siga subiendo y llegue hasta el pulmón. Se comienza el tratamiento en la clínica con heparina y después se transfiere a una medicina oral, sea walfarina o cumadina, durante cuatro a seis meses, la cual se toma en la casa”.

La TVP consiste en la presencia de un coágulo, por múltiples causas,  dentro de una vena no superficial, generalmente de las extremidades inferiores, aunque también puede ser de las superiores y de la pelvis. Esta situación puede  producir embolias  cuando un coágulo formado en la pierna se desprende y viaja hacia la arteria pulmonar y causa problemas respiratorios y hemodinámicos que pueden originar la muerte.

Cuando se ha demostrado que la trombosis de las piernas es bastante extensiva, hay que hacerle seguimiento al paciente con la sonografía del doppler para ver si ha habido empeoramiento, mejoramiento o recanalización de las venas. Esto va a dar una idea de si el paciente va a desarrollar en un futuro lo que se llama el síndrome venoso crónico, que es el daño de las válvulas que impulsan la sangre de las piernas hacia el corazón. Este síndrome ocasiona que la sangre no se mueve en las piernas y estas se hinchan constantemente y la persona no puede caminar. Y se llega al extremo de crear úlcera venosa  que, a su juicio, es terrible”, observó Baquero, de nacionalidad dominicana.

“En ciertos casos los radiólogos intervencionistas usamos un tratamiento más agresivo, que es empleando agentes fibrinolíticos.

Estos disuelven directamente el coágulo. Es como un anticoagulante con una potencia diez veces mayor que la heparina.