Hoy 
Treinta mujeres ebanistas y tapiceras mostraron ayer de cuánto es capaz el deseo de superación, aun cuando se deban enfrentar los prejuicios que dividían los oficios técnicos entre los considerados masculinos y los etiquetados como femeninos.
La tarde del viernes, al inaugurar su IV Feria de Muebles y Artesanías realizadas por mujeres, estas trabajadoras, que estudiaron en el Programa de Formación Técnica y Empleo para Mujeres Evangelina Rodríguez, dieron una demostración indudable de lo que es posible hacer cuando hay deseos de superación.
Esta es la única feria de pequeñas empresarias que trabajan en áreas técnicas no tradicionales.
Casi todas ellas enfrentaron la extrañeza y a veces la oposición inicial de sus maridos cuando anunciaron que iban a estudiar ebanistería o tapicería, un oficio considerado tradicionalmente como masculino.
Evelyn Guillermo, casada y con tres hijos, además de ser evangélica, sufrió el rechazo inicial de su marido a su deseos de capacitarse y hacerse ebanista, pero al cabo del tiempo se impuso y ahora es una fuente importante de los ingresos de la casa. Guillermo, quien tiene su taller en Los Tres Brazos, comenzó trabajando en la cocina de su casa, resistiendo las quejas de su familia por la cantidad de polvillo que inundaba la vivienda cuando ella tenía que pulir madera.
La exposición y venta de muebles y artesanías se realiza en el parqueo del Multicentro La Sirena de la Avenida Charles de Gaulle, en Santo Domingo Este, gracias al respaldo que ha prestado el Grupo Ramos.
La organización de la feria está a cargo del Centro de Solidaridad para el Desarrollo de la Mujer y la Asociación de Mujeres Técnicas (Amutec), con respaldo del Programa de Apoyo a las Pequeñas Empresas (Proempresa).
Ivelise Casilla, también ebanista, quien tiene su taller La Aurora en la calle 12 de octubre de Los Mina, es otro ejemplo de superación.
La IV Feria Expo-Amutec se mantendrá en el parqueo de La Sirena hasta el próximo día 14.
Nelly Chalas, coordinadora del programa por Ce-Mujer, manifestó que la feria es una tradición que ha ayudado a fortalecer la relación de estas mujeres técnicas con la comunidad.
Un vocero del Grupo Ramos indicó a HOY que esa empresa cumple con una responsabilidad corporativa cuando respalda los esfuerzos de superación de las organizaciones comunitarias.
