Tres hombres acusados de asesinar al menos a cinco personas en hechos separados, recibieron tres meses de prisión preventiva, que cumplirán en la cárcel del 15 de Azua. Las muertes ocurrieron en diciembre.

La medida de coerción fue impuesta a Michael Antonio Reyes (El Mono), Ramón Pulinario García (Beregri) y Luis Enrique Díaz López (Pelagio) por el juez de Atención Permanente de San Cristóbal, José Pérez Medina.

Desde tempranas horas de la mañana, decenas de personas, entre ellos familiares y amigos de las víctimas, se colocaron frente al palacio judicial con pancartas, camisetas y fotografías de los muertos para exigir justicia.

Afectados, los manifestantes esperaban en la entrada del recinto para ver a los imputados, sin embargo, por razones de seguridad, las autoridades optaron por trasladarlos por la parte trasera del lugar, lo que los enfureció aún más.

De acuerdo con el expediente, Michael Reyes hirió al sargento del Ejército Carlos Alberto Germán de la Rosa, al raso de la Policía Omar Decena Pérez y al raso de la Armada dominicana Amauris de la Rosa León, así como a los civiles José Alberto de la Rosa Valenzuela, Ángel Florentino Castillo y Hansel Tejeda Amador.

La coerción se produce para garantizar que el Ministerio Público pueda profundizar las investigaciones y confirmar la veracidad de los hechos que se imputan al principal sospechoso de estos crímenes, ocurridos el pasado año en los barrios Canastica, Kilómetro 4 de Cambita Uribe y en el barrio Puerto Rico.

A Reyes se le acusa de herir a Omar Decena Pérez, según se hace constar en el reporte de la subdirección adjunta de investigaciones criminales que dirige el teniente coronel Cándido Arias Bautista.

Mientras se conocía la medida de coerción, decenas de personas, incluidos, los padres de los occisos, pedían la cabeza de Michel Antonio Reyes.

De acuerdo al expediente acusatorio, Reyes se le había escapado en otras ocasiones a las autoridades policiales mientras era trasladado del cuartel general de la Policía a la Fiscalía de esta ciudad.