Tres personajes de paz

Tres personajes de paz

En ocasión de conmemorarse este 21 de septiembre el Día Internacional de la Paz, queremos compartir con nuestros amiguitos tres personajes que son la esencia misma de ese valor universal.

Jesús

Cuando nació Jesús, en el pesebre de Belén, una de las primeras expresiones que recoge la Biblia es el cántico que entonaron los ángeles: “Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad”.

A su paso por la tierra el Hijo de Dios predicó la paz y  en numerosas ocasiones clamó por ella. Ejemplo de  esto lo atestiguan numerosas citas bíblicas,

Quiere decir que la vida de Jesús fue una constante prédica a favor de la paz.

Pero de igual manera, sus ministros han sido multiplicadores de sus mensajes de paz a favor de la humanidad.

Jesús murió crucificado por amor a la humanidad.

Mohandas Karamchand Gandhi  (Mahatma Gandhi)

Nació en Porbandar, India,  1869. Fue un luchador  y cabeza de un movimiento a favor de  la independencia de la India, con un programa de acción que rechazó la violencia.

Estudió derecho en la Oxford y ejerció como abogado en Bombai, pero regresa a su pueblo natal donde funda un movimiento en defensa de los indios  emigrantes, basado en la resistencia no violenta.  Estableció diferentes grandes cooperativas y se sirvió del diario «Indian Opinion», fundado por él en 1904, para difundir sus ideas.  Encarcelado varias veces por sus ideas, realizó huelgas de hambre, fue liberado en 1944.

En 1947 fue aprobada la ley de independencia con la separación de la India y Pakistan, a lo cual Gandhi se oponía; en  1948 fue asesinado por un extremista hindú; su cuerpo fue incinerado y sus cenizas fueron depositadas en el Ganges. 

Martin Luther King

Nacido en Atlanta, Georgia 1929, Martin Luther  King fue un dirigente de la lucha pacífica por los derechos civiles de los negros en Estados Unidos para lo cual estuvo muy influido por Gandhi.

Fue pastor  protestante,  y desde su púlpito proclamó la igualdad. Escribió The Strength to Love (1963) y The Trumpet of Conscience (1967). En el año 1964 le fue otorgado  el Premio Nobel de la Paz, pero no pudo ver realizado su sueño porque fue  asesinado en Memphis, Tennessee 1968.