Al cierre de esta edición la magistrada Suinda Jazmín Brito aún conocía la medida de coerción contra el regidor de Pedro Brand Erinson de los Santos Solís (Ney), acusado de dirigir una red de sicariato que mató a tres chóferes de rutas de transporte público.

A las 11:30 de la noche el Ministerio Publico, representado por la fiscal del Distrito Nacional, Yeni Berenice Reynoso, no había comenzado a presentar su acusación, porque los abogados de la defensa, encabezados por Rafael Ariza, presentaban incidentes.

La audiencia era celebrada a puerta cerrada e incluso abogados de familiares de las víctimas no habían sido llamados a presentar acusación. Desde temprano, decenas de simpatizantes del regidor del PRD estaban frente al Palacio de Justicia con pancartas, redoblantes y lazaban consignas a su favor.

“Hoy en día me arrepiento de ser dominicano”, dijo en la mañana De los Santos durante su audiencia de solicitud de hábeas corpus, que le fue denegada.

Calificó de atropello lo que el Ministerio Público le ha hecho a él, “que es un hombre de familia”.

A pesar de que sus abogados alegaron que estaba detenido de manera irregular desde el 28 de enero, el juez de la Octava Sala Penal del Distrito Nacional, Teófilo Andújar, rechazó la solicitud de libertad.

Argumentó que no había sustentación legal que pruebe que al imputado se le había vencido el plazo, sino que aún guardaba prisión sin medida, debido a que su defensa recusó a la jueza, que de todos modos subió a estrado.