Producto Interno Bruto, consumo y percepción
Ante las informaciones aparecidas en los diarios nacionales con referencia a la situación económica del país durante el último año se ha presentado un preocupante panorama de disparidad entre los datos macroeconómicos del Banco Central y el comportamiento real del mercado de consumo.
Desde el punto de vista de la dinámica de ese mercado se siente una generalizada queja de amplios sectores de la población que desde meses atrás vienen manifestando no contar con los recursos necesarios para gastar y suplir sus necesidades más elementales que puedan justificar el nivel de crecimiento del PIB, situado en un 4,1% por el Banco Central.
Economistas y entendidos han planteado que el dato de un 3% de crecimiento señalado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) es más compatible con la situación por la que han venido atravesando tanto los sectores productivos como de consumo en los últimos doce meses.
Al respecto hemos visto que el Departamento de Cuentas Nacionales y Estadísticas Económicas del Banco Central en su Informe Índice de Precios al Consumidor (IPC) indica que la inflación anualizada de diciembre 2012 a diciembre 2013 concluyó en 3.88%, considerando a este comportamiento por debajo del límite inferior de la meta del Programa Monetario. Para el organismo rector de la economía nacional esta tasa de crecimiento anual de los precios resultó similar al del año 2012 a contrapelo del impacto inflacionario de la reforma tributaria que se puso en vigencia a principios del año pasado. Los expertos, economistas y comunicadores del Gobierno, tienen ahora la tarea de conciliar estos datos, con el propósito de modificar la percepción negativa existente en la opinión pública con respecto a la validez de las cifras aportadas por el Banco Central.