Trípode: El país como una marca

La promoción de los productos exportables del país debería constituirse en una gestión prioritaria de los organismos gubernamentales que tienen la responsabilidad de posicionar a la República Dominicana como una marca con una oferta diversificada, que resalte los atributos, beneficios y valores del sector productivo exportador y de atracción de Inversión Extranjera Directa (IED). En esa línea estratégica se enmarca el acuerdo arribado entre la Cancillería y el Centro de Exportación e Inversión de la República Dominicana (CEI-RD), mediante el cual se da inicio a la preparación del país para aprovechar las nuevas oportunidades de negocios internacionales.
El acuerdo es el correcto, aunque no se puede considerar como algo novedoso, por cuanto se ha implementado en administraciones anteriores. Se procura el involucramiento del cuerpo diplomático en la gestión de negocios mediante la creación de Secciones Comerciales en las Embajadas y Consulados fuera del país. Mediante la puesta en operación de esta línea estratégica ambas instituciones reafirman el compromiso de dirigir una agenda diplomática comercial de acuerdo a los nuevos tiempos de globalización, con el compromiso de contribuir significativamente al desarrollo del país, especialmente los sectores productivos y exportadores nacionales, que demandan el apoyo de un Gobierno más proactivo en materia de comercio exterior.
El Convenio fue rubricado por el Canciller, Miguel Vargas Maldonado y Henry Molina, Director del CEI-RD, asegurando ambos que esos departamentos se convertirán en brazos de los sectores productivos nacionales, cambiando así sustancialmente la visión de las embajadas y consulados dominicanos. Es hora de que en el país los diplomáticos y los empresarios hagan una alianza con el fin de poder catapultar los productos como una Marca País en los mercados internacionales.