El presidente estadounidense, Donald Trump, ha dicho que las conversaciones del TLCAN están yendo “muy bien” conforme los ministros de Estados Unidos, México y Canadá redoblan sus esfuerzos en Washington para llegar a un acuerdo.
El secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, y la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, asistieron a las reuniones del martes en la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos en Washington. Se espera que las reuniones de alto nivel continúen hasta hoy jueves, según un cargo familiarizado con las conversaciones, que pidió permanecer en el anonimato. El impulso se produce antes de una misión comercial de Estados Unidos a China, y a medida que las elecciones mexicanas y estadounidenses se aproximan.
Las partes han acelerado el ritmo en las últimas semanas, aunque el objetivo no está claro. Estados Unidos reflexionó sobre un trato “en principio” y México dice que quiere un acuerdo integral para actualizar un pacto de hace 24 años. En sus comentarios más recientes, Trump ha dicho que las conversaciones van bien pero ha expresado preocupación por un acuerdo rápido.

“El TLCAN, como sabe, está progresando”, dijo Trump en una reunión con el presidente francés Emmanuel Macron el martes en Washington. “Podría llegar a un acuerdo muy rápido, pero no estoy seguro de que sea lo mejor para Estados Unidos. Veremos qué sucede, pero vamos muy bien”.

En un supuesto optimista, los negociadores tienen un 75 por ciento de posibilidades de llegar a un acuerdo pronto, dijo el martes Moisés Kalach, jefe comercial de la cámara de negocios mexicana conocida como CCE, en declaraciones a la radio del Grupo Fórmula. Se podría llegar a un acuerdo sobre un Tratado de Libre Comercio de América del Norte actualizado en los próximos 10 días, manifestó.
De no llegarse a un acuerdo en los próximos días, podría tener sentido suspender las negociaciones hasta finales de año o principios de 2019, dadas las elecciones presidenciales en México en julio y la votación de mitad de período del Congreso de Estados Unidos en noviembre, dijo Kalach.

Los equipos de negociación acordaron nueve o 10 áreas temáticas más que están listas para la revisión y aprobación de los ministros, dijo Kalach.
Conversaciones en Washington. Aun así, sigue habiendo grandes diferencias sobre algunas de las cuestiones más difíciles, como un endurecimiento de la normativa de origen para automóviles y sus componentes, destinada a impulsar la fabricación estadounidense, pero que podrían impactar las actuales cadenas de suministro.

Los negociadores también han concluido los trabajos en el capítulo de telecomunicaciones, dijeron dos personas familiarizadas con las conversaciones la semana pasada, las cuales pidieron que no se revelara su identidad ya que se trata de negociaciones privadas.

Freeland de Canadá dijo que las conversaciones del martes se centraron en las reglas de origen automotrices, un punto crucial, que ella ve como el eje de un acuerdo. Freeland señaló que los negociadores han mantenido conversaciones constructivas sobre el tema durante un tiempo, las cuales recibieron un impulso en parte debido a algunas ideas creativas presentadas por el lado estadounidense el mes pasado.

Si bien reconoció que “hay otros asuntos que aún deben resolverse”, la ministra dijo que creía que un acuerdo en el que las tres partes saliesen ganando “es posible”.
Los negociadores de Trump han estado presionando para llegar a un acuerdo a principios de mayo. Con ello se cumpliría el plazo de Estados Unidos de tener un acuerdo aprobado, a más tardar, en la última sesión del Congreso que seguirá a las elecciones legislativas el 6 de noviembre, dijeron dos personas familiarizadas con las negociaciones.

Guajardo ha dicho este mes que ve un 80 por ciento de posibilidades de un acuerdo para la primera semana de mayo. Los negociadores también tienen prisa por llegar a un acuerdo ante las elecciones del 1 de julio en México.