El presidente de Estados Unidos comunicó el jueves al Congreso que está cancelando los aumentos salariales que la mayoría de los empleados federales civiles recibirían en enero, alegando restricciones presupuestarias.
Donald Trump informó su decisión en una carta enviada a los líderes de la Cámara de Representantes y del Senado.
El mandatario dijo en la misiva que los incrementos de sueldos a nivel local costarían 25,000 millones de dólares, además de un incremento general de 2,1% para la mayoría de los empleados civiles del gobierno. Citando los costos, Trump afirmó: «Debemos mantener los esfuerzos para poner a nuestra Nación en un curso fiscalmente sostenible, y los presupuestos de las agencias Federales no pueden sostener esos incrementos».
Trump dijo estar decidido a que en 2019 «tanto los incrementos generales como los de nivel local sean fijados en cero». El portavoz del Comité Nacional Demócrata (DNC), Daniel Wessel, reaccionó en un comunicado en el que acusó al jefe de Estado de haberle propinado “una nueva bofetada” a los trabajadores estadounidenses. “Trump disparó el déficit con su recorte fiscal masivo a las grandes empresas y a los más ricos, mientras que las familias no se llevaron nada”, criticó Wessel.