El presidente Donald Trump declaró ayer que “Irán cometió un grandísimo error» al derribar un dron estadounidense de reconocimiento en el estrecho de Ormuz, pero insinuó que fue una equivocación tonta y no un recrudecimiento intencional de las tensiones que han aumentado temores de conflicto militar. A la pregunta de cuál será la respuesta de Estados Unidos ante este hecho, dijo: “Pronto lo sabrán».
El derribo de la aeronave no tripulada que Irán describió como acto intencional de defensa de su territorio, no como error, fue recordatorio del peligro de conflicto militar entre ambos países en momentos en que el gobierno de Trump aplica campaña de “presión máxima» de sanciones económicas contra Irán al tiempo que acumula fuerzas estadounidenses en la región.
“Terrorismo económico” Ayer, Irán aseguró que las sanciones son “terrorismo económico», que el dron invadió su espacio aéreo y que expondrá el caso ante Naciones Unidas en un intento por mostrar que Estados Unidos miente cuando afirma que el aparato volaba sobre aguas internacionales. Irán acusó a EEUU de incurrir en “un acto muy peligroso y provocador».
El dron, cuya envergadura es mayor que la de un Boeing 737, ingresó en el espacio aéreo iraní “a pesar de las reiteradas advertencias hechas por radio» e Irán lo derribó en una acción apegada a la carta de Naciones Unidas que permite acciones de autodefensa “en caso de ataque armado», dijo el embajador iraní ante ONU, Majid Takht Ravanchi. Trump pareció minimizar la importancia del derribo.
El mandatario se refirió a lo sucedido como “otra novedad… otra mosca en la sopa». Sin embargo, señaló que “este país no tolerará ese tipo de acciones».