Trump habla con líderes y trata de apaciguar impacto de su política

Trump habla con líderes y trata de apaciguar impacto de su política

Luego de una semana como presidente, Donald Trump habló este sábado por teléfono con varios líderes mundiales, en medio de una creciente alarma internacional generada por sus decretos para limitar drásticamente la inmigración musulmana en Estados Unidos.
Trump se comunicó durante la jornada con el primer ministro japonés Shinzo Abe, con la canciller alemana Angela Merkel, con el presidente ruso Vladimir Putin y con el mandatario francés François Hollande. Un comunicado de la presidencia francesa indicó que Hollande le solicitó a Trump que respetara el principio de acogida de refugiados y le advirtió sobre las consecuencias del proteccionismo comercial que impulsa. Hollande «recordó su convicción de que el combate por la defensa de nuestras democracias» solo es «eficaz» si se basa en el «respeto de los principios que las fundan, en particular, la acogida de refugiados». Además, «advirtió de las consecuencias económicas y políticas de un enfoque proteccionista», de acuerdo a la nota oficial. Por su lado, el Kremlin señaló que Putin y Trump acordaron en su diálogo telefónico mantener relaciones «de igual a igual» y se expresaron «a favor de la puesta en marcha de una coordinación real de las acciones rusas y estadounidenses para destruir al EI y otras agrupaciones terroristas en Siria».
El presidente estadounidense también conversó con el primer ministro japonés Abe, a quien le ratificó el «férreo compromiso» de su país con la seguridad de Japón, según informó la Casa Blanca en un comunicado. Estas conversaciones dieron a Trump una oportunidad de explicar sus nuevas políticas contra refugiados e inmigrantes, que han conmocionado a gran parte del mundo, particularmente su decreto para frenar temporalmente las llegadas de refugiados e imponer controles estrictos a viajeros de siete países musulmanes.
‘Investigaciones extremas’.- La medida sobre la inmigración musulmana cumple con una de las promesas más controvertidas de la campaña, cuando Trump dijo que iba a contener la inmigración de varios países musulmanes que, según él, suponen una amenaza terrorista para Estados Unidos, y someter a los viajeros de esas naciones a «investigaciones extremas». «Esto es muy importante», dijo el presidente el viernes en el Pentágono después de firmar la orden ejecutiva titulada «Protección de la nación contra la entrada de terroristas extranjeros en Estados Unidos».
El decreto suspende el programa estadounidense de acogida de refugiados durante al menos 120 días, mientras se concreta el futuro sistema de verificación de visas. También prohíbe la entrada a Estados Unidos de viajeros procedentes de países de mayoría musulmana -Irán, Irak, Libia, Somalia, Sudán, Siria y Yemen- durante 90 días.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas