Washington. – El presidente estadounidense Donald Trump rompió públicamente este miércoles, y en forma espectacular, con su controvertido exjefe de Estrategia en la Casa Blanca, Steve Bannon, a quien acusó de haber perdido la razón.
Momentos después de conocerse adelantos de un explosivo libro en el que Bannon critica a allegados y familiares del presidente, Trump emitió una nota para afirmar que el exfuncionario «no tiene nada que ver conmigo ni con mi presidencia».
«Cuando fue despedido (de la Casa Blanca), no solo perdió su trabajo, sino que también perdió la razón», afirmó el mandatario. Trump acusó a su exjefe de Estrategia de filtrar informaciones falsas cuando estaba en la Casa Blanca para aparentar ser más importante de lo que era en realidad, de no haber hecho aportes de importancia a la victoria electoral y hasta del fracaso en una elección local en Alabama.
En su nota oficial, Trump dijo: Bannon «raramente tuvo reuniones individuales conmigo, y solamente aparenta tener influencia ante personas que no tienen ni acceso ni información». Además, apuntó que «finge estar en guerra con los medios de prensa, a los que llama ‘partido de oposición’, pero pasó su tiempo en la Casa Blanca filtrando información falsa a la prensa para parecer ser más importante de lo que era».
«Es lo único que hace bien», añadió. La airada reacción de la Casa Blanca hacia el antiguo confidente de Trump es una respuesta a las declaraciones de Bannon en el libro «Fuego y furia: dentro de la Casa Blanca de Trump», de Michael Wolff. La portavoz de la presidencia, Sarah Sanders, dijo que ese libro «solo puede ser descrito como ficción de tabloide basura, por parte de personas tristes que buscan desesperadamente tener alguna relevancia».
Críticas al entorno de Trump. En su testimonio para ese libro, Bannon arremete sin piedad contra allegados próximos del presidente, como su hijo Donald Trump Junior, su yerno Jared Kushner y su ex jefe de campaña electoral Paul Manafort. Bannon afirma, por ejemplo, que una reunión mantenida por Trump Junior, Kushner y Manafort con una abogada rusa en junio de 2016, en plena campaña electoral, fue una «traición».
«Aún si uno piensa que eso no era una traición, que tampoco era antipatriótico o que no era simplemente una mierda -y yo creo que fue las tres cosas- uno debería avisar inmediatamente al FBI», dijo Bannon, de acuerdo con un adelanto del libro. Además, dijo que los tres eran responsables por poner en riesgo la presidencia de Trump por atraer la curiosidad de los agentes del FBI, no por sus contactos con funcionarios rusos sino por sus oscuros negocios. «El camino para joder a Trump pasa por Paul Manafort, Donald Junior y Jared Kushner.
Es tan claro como un pelo en la cara. Pasa por el Deutsche Bank y toda la mierda de Kushner. Toda esa mierda de Kushner es espesa», comentó. Un equipo del FBI, conducido por el fiscal especial Robert Mueller, investiga la eventual colusión entre el comité de campaña de Trump y funcionarios rusos durante la elección presidencial de 2016, y ya presentó cargos contra Manafort por falso testimonio y lavado de dinero.
Bannon había alcanzado notoriedad como editor de un sitio web de ultraderecha y activista considerado próximo a los supremacistas blancos estadounidenses. Sin embargo, se convirtió en un asesor de Trump en 2016 y después de las elecciones ocupó un cargo clave en el gobierno, el de Jefe de Estrategia, hasta que renunció en agosto de 2017.
Desde que dejó la Casa Blanca, Bannon se dedica a apoyar a los candidatos más a la derecha del Partido Republicano, y nunca escondió cierto distanciamiento personal del presidente Trump.