No importa si lo odias o lo amas, Donald Trump está de vuelta.
El expresidente de EE.UU. es el favorito, de largo, para convertirse en el candidato republicano a las elecciones presidenciales del próximo mes de noviembre.
Especialmente después de su victoria este martes en las primarias de New Hampshire, donde venció a la exembajadora de EE.UU. ante la ONU Nikki Haley.
Aunque Trump no ganó por el amplio margen que predecían las encuestas, ha sido suficiente para mantener la corriente actual de la disputa por la nominación, que había comenzado con una victoria en los caucus de Iowa.
En su triunfo en Iowa, Trump consiguió más votos que todos sus rivales juntos, lo que hizo que la mayoría de los candidatos, entre ellos el gobernador de Florida, Ron DeSantis, abandonaran la contienda.
Ahora solo quedan Trump y Haley en la disputa.
Si Trump logra conseguir la nominación y después vencer a su rival democráta en las elecciones del 5 de noviembre, será el primer presidente en más de un siglo en EE.UU. en perder una elección y regresar cuatro años más tarde al poder.
El último mandatario que lo hizo fue Grover Cleveland en 1892.
Aunque todavía es muy temprano en la campaña presidencial, la victoria de Trump en New Hampshire es un signo de que su popularidad es muy alta dentro del Partido Republicano.
Te contamos 5 razones que explican esto.
1. La economía
«Él va a hacer que la economía vuelva a subir y los precios de la gasolina van a bajar», respondió a la BBC una seguidora de Trump en Iowa sobre las razones por las que quería que volviera a ser presidente.
No es la única que piensa así.
La economía ha sido parte del mensaje de Trump en esta campaña. Su propio hijo Eric le dijo a la BBC: «La gente quiere prosperidad y fortalecimiento para este país».
«Mi padre tuvo el mejor periodo económico en la historia de este país: la tasa de desempleo más baja, la inflación más baja, los precios de la gasolina accesibles», aseguró
Es verdad que la economía de EE.UU. pasó por un buen momento cuando Trump estuvo en el poder, especialmente antes de la pandemia.
Pero también es cierto que hubo períodos de mayor prosperidad económica en algunas fases de la presidencia de Barack Obama (2009-2017).
Sin embargo, el gobierno de Donald Trump tuvo que enfrentar la crisis de la covid-19, que ha sido uno de los mayores golpes a la economía global en las últimas décadas.
Durante la presidencia de Joe Biden la guerra en Ucrania ha elevado mucho el costo de la energía, lo que ha causado un aumento considerable de la inflación, si bien muchos expertos consideran que esto ya se ha controlado y la economía estadounidense está mucho más fuerte de lo que se esperaba el año pasado.
2. «Dinámico Trump» vs «Joe el dormido»
La comparación entre la gestión de Joe Biden y la de Donald Trump favorece a este último, argumenta el que fuera director de comunicaciones de la campaña del republicano en 2020, Marc Lotter.
«Lo que no tenia Biden en 2020 era una gestión para comparar con la de Trump. Ahora sí la tiene y a la gente no le gusta», dice.
Para Billy Blathras, seguidor de Trump, lo que más le gusta del expresidente es que es un «líder dinámico».
«Vimos lo que hizo en su primer gobierno. Queremos eso de vuelta. Hemos visto el retroceso de nuestro país bajo el mandato de Biden», señala.
Y añade: «queremos el apoyo entusiasta de la gente de EE.UU. que estuvo con él cuando era presidente».
Ahora, su pasado como hombre de negocios y celebridad, más allá de su carrera política, sigue siendo un factor clave.
«Este país no necesita otro político en la presidencia. Creo que el mejor candidato es el que sepa llevar una empresa».
La personalidad fuerte de Trump es vista por muchos republicanos como un contraste positivo a la personalidad de Biden, a quien los críticos llaman «Joe el dormido» (Sleepy Joe, en inglés) después de que las cámaras lo captaran con los ojos cerrados durante la cumbre del clima de la COP26.
Con la casi total seguridad de que Biden será el candidato demócrata para las elecciones, en noviembre se prevé una revancha entre él y Trump.
Pero ya sabemos que la última vez que ambos compitieron, Biden ganó.
3. Inmigración
Cuando Trump dijo que los inmigrantes estaban «envenenando la sangre de nuestro país» durante una entrevista con el portal de noticias de tendencia conservadora The National Pulse el pasado mes de octubre, Biden lo acusó de usar una retórica que se hacía eco de la Alemania nazi.
«Trump ha dicho que si él regresa a la oficina, va a ir contra todos aquellos que se oponen a él y que va a eliminar a las alimañas en EE.UU., una frase específica con un significado específico», dijo Biden.
«Esos son ecos de la Alemania nazi en los años 30. Y no es la primera vez que lo hace», añadió.
Historiadores y expertos que han estudiado el tema dijeron que la comparación de Biden es acertada.
«No es que escuchemos un lenguaje o algo que se parece a la Alemania nazi, es que fue dicho exactamente así», le dijo a la BBC la profesora Anne Berg, historiadora de la Universidad de Pennsylvania.
Berg señala que esto lo hicieron los nazis una vez llegaron al poder en contra de sus adversarios políticos.
Una encuesta del canal CBS halló que dentro del Partido Republicano se apoyan estos comentarios.
CBS les preguntó a los votantes republicanos si estaban de acuerdo o en desacuerdo con lo señalado por Trump de dos maneras.
A la mitad se les preguntó simplemente sobre el comentario de que «están envenenando la sangre del país» sin atribuciones y a la otra mitad se les presentó el mismo comentario, pero añadiendo que lo había dicho Trump.
De cualquier manera, la mayoría de republicanos estaba de acuerdo: 72% dijo que compartía el comentario sin atribuírselo a nadie y el 82% estaba de acuerdo con lo que decía Trump, por lo que se puede concluir que su rechazo a la inmigración sigue siendo muy bienvenido dentro de sus seguidores.
4. Cerca de los jóvenes
Un reciente impulso para Trump ha sido la evidencia de que podría estar superando a Biden entre los votantes más jóvenes.
Una encuesta publicada a mediados de diciembre por The New York Times y el Siena College mostraba seis puntos porcentuales de ventaja entre los votantes de 18 a 29 años.
Los expertos están analizando los detalles de la tendencia, pero sugiere un panorama sustancialmente diferente al de las elecciones de 2020, cuando Trump estaba 24 puntos porcentuales detrás de Biden entre el mismo grupo de edad.
Esto puede explicarse en parte por la incapacidad de Biden para conectarse con los votantes más jóvenes y las señales de que están frustrados por su manejo de la guerra entre Israel y Hamás, tanto como por la popularidad de Trump.
Sin embargo, para Mary Weston, directora del grupo Jóvenes Republicanos de Iowa, los jóvenes republicanos se sienten atraídos por Trump por su poder en el escenario: «Uno se queda asombrado por cómo se comporta y cómo habla».
Ahora tiene 23 años, pero estaba en la secundaria cuando Trump era presidente y dice que mucha gente «se burló y la acosó» por apoyarlo.
Weston cree que el hecho de que «él defiende lo que cree» y «no tiene miedo de ser quien quiere ser» atrae a los votantes jóvenes.
Añade que las acusaciones en su contra han significado que «gran parte de la base quiera luchar por él, para demostrarles a los demócratas que todavía lo vamos a apoyar».
5. Visto como una «víctima»
Tiene una demanda en Nueva York y ha sido acusado formalmente en Georgia, Florida, Manhattan y Washington, mientras los fiscales federales y estatales de otros lugares han abierto una serie de investigaciones.
Las demandas en varios estados también buscan descalificar a Trump de la carrera presidencial, argumentando que participó en una insurrección durante los disturbios en el Capitolio de Estados Unidos hace tres años.
Si bien se podría esperar que los casos judiciales pendientes desanimen a sus partidarios, el veterano encuestador Frank Lance le dijo a la BBC que en realidad eso lo que hace es ayudar a la causa de Trump:
«Pudo presentar el caso de que él es la víctima, que está siendo perseguido y no sólo procesado, y que todo esto es una caza de brujas», dijo.
«Cada vez que lo acusaron, sus números aumentaron. Cada vez que lo sacaron de la boleta electoral, en Maine y Colorado, sus cifras aumentaron. Cada vez que atacas a Donald Trump, él lo aprovecha. Nunca hemos visto a nadie en Estados Unidos como él», agregó.
Sin embargo, vale la pena aclarar que, a pesar del éxito de Trump, un análisis de votantes de Fox News encontró que el 32% de los que participaron en las primarias republicanas de New Hampshire no votarían por él en las elecciones generales de noviembre.
Su última rival, Nikki Haley, tampoco se rendirá sin luchar.
Haley mira ya hacia las próximas primarias fijadas para el 24 de febrero en Carolina del Sur, estado del que fue gobernadora, aunque podría abandonar la carrera debido a que gastó decenas de millones de dólares en esta primaria y para llegar a la próxima necesitará más contribuciones.
Para muchos analistas, lo más probable es que Trump sea el candidato republicano para las elecciones presidenciales de Estados Unidos de este año gracias a sus inquebrantables y leales seguidores, lo que demuestra, en palabras del corresponsal de la BBC en Norteamérica Anthony Zurcher, que «el Partido Republicano sigue siendo el partido de Donald Trump».