Aunque el turismo cerrará el año con un ligero crecimiento, tal  resultado fue posible por la buena temporada de verano, ya que en los últimos meses del año el flujo de visitantes ha sido negativo, a causa del  impacto de la crisis financiera internacional.

Las expectativas para el 2009 son  que sólo un gran esfuerzo entre el sector privado y el gobierno pudiera evitar que el crecimiento del sector sea negativo, sobre todo si la crisis financiera internacional y la consecuente recesión económica mundial se prolongan, según opiniones emitidas por empresarios privados.

Según cifras oficiales, el flujo de extranjeros por vía aérea ascendió a 3,140,253 de enero a diciembre, incrementándose en  2.10% con respecto al mismo período anterior (había crecido apenas en 1% con relación al 2006).

En términos generales, las cifras preliminares aún del Banco Central evidencian que el flujo turístico cerrará el año con más de 4, 300,000 llegadas, incluyendo  los más de 500 mil cruceristas.

En ese período llegaron 1,006.286 visitantes (1.61% más que en 2007) desde Estados Unidos, mercado que concentra el 34% del flujo turístico.

Como el turismo  se basa en contratos, se hacía difícil que los ya contratados para 2008 fueran cancelados. Ese no sería el caso para el 2009, año para el cual se firmarían nuevos contratos en plena crisis.

También se ha planteado que se deben adoptar medidas para mejorar la competitividad del sector.

No obstante, se ha visto como una señal positiva el hecho de que se haya anunciado nuevas inversiones en el sector.

Aunque se trata de inversiones que requieren un período de maduración, revelan que los inversionistas confían en el potencial del sector.