El turismo literario gana cada año más terreno en la Feria Internacional del Libro de Santo Domingo, convirtiéndose en un generador de recursos que dinamiza la economía y promueve la cultura y la literatura dominicana.
Durante la pasada edición de este evento, que finalizó el pasado 4 de septiembre, hubo un enfoque hacia el fortalecimiento y el desarrollo del turismo literario en la República Dominicana a través de la transformación de los activos literarios en recursos económicos y del fomento de actividades históricas y culturales.
Así lo plantearon el director de coordinación y operaciones de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias (CPEP), Juan Alberto Michel, y el director del expositor de Libros Reliquias, Manolo Patrocina, quienes resaltaron el incremento de las visitas de turistas a sus estands en busca de libros sobre literatura, historia y cultura.
Según Michel, los turistas se hicieron notar en los primeros días de la Feria del Libro mostrando interés por los textos que les permiten conocer a los grandes héroes del país, así como las gestas patrióticas y revolucionarias.
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“Este año hemos recibido la visita de muchos turistas a nuestro estand y ha sido impactante ver las compras en dólares de decenas de libros. Esta es una de las ferias que ha generado mayor interés en los turistas, lo cual se ha visto reflejado en un aumento de su participación”, manifestó.
Para el director de coordinación y operaciones de la CPEP, la participación de turistas, no solo americanos y europeos, sino también latinoamericanos, es una muestra del potencial que tiene República Dominicana para seguir desarrollando y promoviendo el turismo literario.
De acuerdo con Michel, cuanto más se fortalezca el turismo literario es posible generar mayores ingresos y divisas, lo cual tiene un impacto directo en la creación de empleos, la dinamización de las ventas y la apertura de mayores oportunidades para quienes están inmersos en el negocio de los libros.
En ese sentido, el director del estand de Libros Reliquias, Manolo Patrocina, explicó que la literatura de viajes, la de negocios y los clásicos fueron el mayor atractivo para los turistas que se acercaron a su caseta, a quienes definió como importantes aliados para la dinamización de las ventas.
“Santo Domingo es el paraíso de la cultura. Contamos con una gran producción bibliográfica y una literatura muy diversa y a precios muy asequibles, lo cual nos convierte en un destino atractivo para el desarrollo del turismo literario”, destacó Patrocina.
El mismo director del estand de Libros Reliquias invitó a los turistas y dominicanos a seguir dando apoyo con su visita y compra a próximas Ferias del Libro porque “Para todo hay un libro”, como rezó el lema de la pasada fiesta cultural.
Asimismo, Patrocina resaltó que, gracias a la organización y a la climatización de los pabellones cubiertos, los visitantes pueden tener una mejor experiencia literaria.
Este año, la XXV Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2023 (FILSD 2023) se dedicó a la intelectual Jeannette Miller y contó con más de 50 invitados internacionales, en representación de 18 naciones, así como con la participación de Israel como país invitado.
El turismo literario en la actualidad
En los últimos años se ha podido comprobar cómo algunos grandes éxitos literarios de ficción han favorecido el incremento del turismo en ciudades de medio mundo. Los lectores buscan una conexión real con ese libro que les ha entusiasmado y desean descubrir con sus propios ojos los lugares que tanto han imaginado tras las páginas de una novela.
Pero no solo los libros despiertan el interés de los viajeros literarios, los autores también se convierten en protagonistas. Las casas donde nacieron los escritores, donde vivieron durante gran parte de su vida o los cementerios donde fueron enterrados también se han convertido en destinos literarios de interés.
Muchas de estas viviendas han sido convertidas en casas-museo, manteniendo el estilo y el mobiliario de la época.