Una de las características que  identifican a un país, aparte de  su gente, sus costumbres, su música, su raza, e incluso en ocasiones el comportamiento, es sin duda su comida. Esas delicias que  se han convertido en su sello gastronómico.

Esas recetas que hacía la abuela, las que se convertían en una de las principales razones  que nos  motivaba a visitarla. ¿Y quién no disfrutó de un turroncito de coco, hecho por las manos del ser que más  consentía a los nietos?

Pero disfrutar de ese particular y exquisito dulce, que se degustaba en la tarde, hecho en  casa de abuela, es quizás cosa del pasado.

Es en el afán de rescatar las costumbres que se han hecho muy nuestras, que traemos hoy día este dulce manjar.

Es una manera de recordar nuestras raíces e intentar volver a servir en la mesa dominicana las delicias que nos harían recordar los memorables momentos vividos hace ya varios años.

Al dar el primer mordisco a este turrón, hecho con coco rallado, es posible  trasladarse de inmediato a esos años en  que era frecuente  ver en los hogares  los magníficos y bien cuidados fogones de las casas.    

Y así lo explican ejecutivos de  Criollísimos, una tienda especializada en la elaboración de los principales dulces característicos de nuestro país.

El turrón de coco  nos hace recordar el olor de la leña en el fogón, el ahumado en las comidas, las yaguas para deslizarse en las colinas, el caballito con el palo de la escoba, es volver a vivir lo olvidado al momento de degustarlo.

“Esta y la mayoría de nuestras recetas vienen desde los abuelos como tradición cultural y familiar”, señalan.

Este dulce es la modalidad del dulce de coco  más antiguo desde nuestros orígenes. Todos estos postres llegan, nacieron y se perfeccionaron en tiempos de la colonia, y se han convertido en  una parte importante de nuestra tradición culinaria.

Criollísimos. Es una tienda en la cual tratan de  mostrar la cultura, el sabor y la tradición del país, al que han denominado “el más dulce del mundo”. Preparan la mayoría de los dulces típicos nacionales.

Su propietaria, Rosario Rodríguez, busca mantener la esencia de los dulces dominicanos. Elaborar “arreglos” con dulce, acompañados de algunos detalles que identifican la cultura criolla, como  anafes,  sillas  de guano,  limpiabotas…

Está ubicado en Plaza Las Américas II. 

Zoom

Variedad del turrón de coco

Para ampliar la oferta de estos dulces, a los que algunos también le llaman “cocada”, hay quienes le agreguen colores. Para lograr este efecto se valen de los colorantes vegetales, que venden en los mercados o supermercados nacionales.

En otros lugares del mundo

En otros países elaboran un dulce muy parecido al nuestro, pero además le agregan chocolate blanco o negro, pero lo sirven en la Navidad. Pero no es el turrón duro con nueces.

Recetas

Turrón de coco

4 cocos maduros

1 1/2 libra de azúcar crema

2 astillas de canela

1 pizca de jengibre

Nuez moscada al gusto

3 tazas de leche

2 tazas de agua de coco

Preparación. Corte los cocos en dos partes y reserve el agua, ráspelo con una cuchara en sentido contrario a la fibra, y reserve. En un caldero de fondo vierta  el  agua reservada del coco y la leche, el azúcar, el coco, la canela y el jengibre, deje hervir moviendo constantemente, sin dejar pegar, hasta que se ponga a punto de hilo, agregar la nuez moscada a su gusto. En otro caldero de fondo grueso úntelo de aceite, colóquelo en el fogón ya prendido, vierta un poco de la mezcla hasta formar una fina torta, repetir hasta agotar la mezcla dejar en el fuego por 10 minutos, retirar por 5 minutos, luego de refrescarse colóquelo nuevamente en el fuego, repita el proceso 2 veces más para que la parte interna quede jugosa. Dependiendo el tamaño del caldero de esta mezcla salen varias tortas.