Por EVARISTO RUBENS
El presidente de la Asociación Dominicana de Industrias Lácteas (ADIL) dijo que mientras los demás productos de la rectificación técnica, las importaciones las hacen las industrias y los productores, en el caso de la leche los importadores reciben  imposición de la Unión Europea.

El licenciado Julio Virgilio Brache afirmó que el país perdió la soberanía con la rectificación técnica en el caso de la leche en polvo, contrario a lo ocurrido con los demás productos de ese sistema.

Brache, vicepresidente corporativo de Pasteurizadora Rica, participó en el Encuentro Económico de Hoy, junto a Alejandro Suárez, Freddy García Castillo, Juan Ferrúa y Humberto José Reginato, miembros de ADIL.

El presidente de esa entidad se quejó de que en vez de la Unión Europea, la República Dominicana es quien debe manejar la cuota de importación de leche en polvo.

Agregó que la República Dominicana es quien debe tener el liderazgo de esa decisión y trazar su propia política como país soberano e independiente.

Recordó que a principios de los años 90 el país firmó el acuerdo del GATT, en el que República Dominicana puso un arancel tope de un 40% debido a que nuestros representantes asumieron que ese porciento era suficiente para todos los productos nacionales, incluyendo los de origen agrícola.  

Indicó que luego los productores agropecuarios protestaron por ese arancel, ya que quedaban desprotegidos y el país apeló a ese tope del 40%.

Agregó que el caso fue llevado a Ginebra, en donde le informaron al país que el caso apelable, pero que llevaba una serie de condiciones:

El país podía rectificar el acuerdo que había firmado para ocho productos agrícolas (arroz, carne de pollo, ajo, cebolla, habichuela, azúcar, maíz y leche).    

Para esos productos sensibles se acordaron unas partidas arancelarias con diferentes aranceles y salvaguarda con protecciones de 80 a 100 por ciento, desmontables a través de un período de 10 años otorgados por la Organización Mundial del Comercio (OMC). 

Brache explicó que en esos 10 años el país debía adaptarse al nuevo mundo de libre comercio, pero en el caso de la leche se fijó una cuota única, contrario a los demás productos que tenían una cuota que iba aumentando en cantidades acorde con el crecimiento poblacional, hotelero, etc.

Expresó que para él no se aprobó una rectificación técnica, sino una imposición de la Unión Europea, porque el país ante esa apelación que tuvo que hacer ante la OMC, ese organismo le dijo que sólo tenía un solo remedio que tenía que tomarse y tendría un efecto secundario, el cual mas negativo fue el de la leche.

El presidente de ADIL manifestó que el primer efecto negativo fue que el país le entregaba el manejo de la cuota de importación de leche a la Unión Europea, lo que no ocurrió con ningún otro producto.

Recordó que en los demás productos de la rectificación técnica, los procesadores y productores son los que importan los faltantes junto al comercio organizado.

Brache se quejó que en el negocio de la leche, las industria procesadoras de ese alimento no tienen derecho a importar ese producto en polvo.

Agregó que ese derecho lo asigna la Unión Europea y es quien traza la política en República Dominicana en materia de leche.