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Si la primera parte del Primer Simposio Internacional sobre Drogas en los días 28 y 29 de junio pasados llenó plenamente las expectativas de los organizadores de ese evento, por la cantidad, calidad, amplitud, diversidad y actualidad de las exposiciones de los expertos nacionales y extranjeros participantes; la fase final de ese gran evento culminó el día 30 de junio, con muchas propuestas innovadoras para enfrentar las causas y efectos del fenómeno de las drogas.
Para esos fines, los participantes se dividieron en dos paneles. La representante de la OEA en el país, Araceli Azuara, resumió brillantemente el voluminoso informe presentado en la recién pasada Asamblea General, cuyo tema principal fue precisamente el de las drogas en el continente. Le siguió el Mayor General Julio César Souffront, nuevo presidente de la DNCD, con vasta experiencia en esos menesteres, quien aprovechó la oportunidad para señalar que mantendrá y profundizará la persecución del tráfico de drogas, con apoyo de las comunidades, y fortalecerá las tareas de prevención, tratamiento y rehabilitación de adictos, con los bienes decomisados para las ONG que trabajan en esa área.
Por su parte, el Dr. Carlos Ángeles planteó que el enfoque biomédico de las adicciones olvida el tema de los valores del ser humano, porque el problema es en esencia moral. Corregirlo tomará varias generaciones. La persecución puede ser necesaria pero no es la solución.
El Dr. Moreno Ceballos destacó a su vez que el problema de las drogas, con toda su complejidad, que se ha venido postergando en lo legislativo, donde deben tener cabida no solo los aspectos biomédicos y los delitos del narcotráfico y lavado de activos, sino los aspectos antropológicos, sociales y educativos. Presentó el problema del desempleo como un aspecto crítico, ya que un 35% de los jóvenes ni estudian ni trabajan; lo que representa un gran factor de riesgo, pues las normas actuales responden a la estrategia norteamericana de trasladar la persecución a los países productores y de tránsito, y a exonerar a los países consumidores.
El Magistrado Nelson Beltré, de la fiscalía de la Provincia Santo Domingo, planteó la necesidad de superar la legislación que data 1988, la cual condena a los consumidores de heroína sin importar su dosis y a los demás por dosis muy bajas, castigándolos como verdaderos traficantes. Hay que darle sentido humano a la investigación y persecución de las drogas.
La Dra. Dulce Luciano, de la Comisión Ejecutiva de Lavado de Activos, se refirió a la necesidad de revisar la Ley 72-02 sobre la materia para adecuarla a la normativa internacional, pues hay 40 nuevas recomendaciones del GAFIC sobre el particular.
También tuvieron participación destacada en ese panel, Beatriz Arenas, especialista adscrita a la Embajada Norteamericana, y el Dr. Luis Scheker Ortiz, Vicepresidente de la Academia, quien actúo como moderador del panel.
En el panel sobre prevención, tratamiento y rehabilitación de drogadictos participaron activamente la Dra. Ruth Santana, moderadora, el Dr. Sócrates Castillo, Dr. Huberto Bogaert, Lic. Ana Navarro, Lic. Hanoi Vargas y Radhamés de la Rosa.
En una próxima entrega comentaré las propuestas concretas del Simposio, como primicia del documento final a ser publicado en su totalidad.