El cura, así se les denomina a los sacerdotes católicos, Cristopher Hartley es un individuo de graves resentimientos que le conducen rápido y persistente a incursionar en 1a perversidad, pretendiéndole hacer daño a nuestro país.

Luego de su desempeño turbio en e1 sur de nuestro país, e1 cura Hartley fue trasladado a Francia, por evidente solicitud del gobierno dominicano a El Vaticano; precisándose que se trata de dos estados.

El cura Hartley ha insistido por un tiempo más que prudente en denunciar un supuesto estado de esclavitud que practican en los ingenios de caña de azúcar en RD, que son administrados por firmas privadas, pero ha hecho énfasis en al Grupo Vicini.

En nuestro país debe residir aproximadamente un millón de haitianos indocumentados en su país y también aquí, laborando no solamente en los cañaverales, sino en varios estamentos agrícolas, sector de la construcción y encargados de mantenimientos en edificios privados.

Es imposible que un millón de haitianos sufra esc1avitud pudiendo regresar por tierra sin ninguna dificultad a su país de origen, pero se mantienen aquí, “sufriendo esclavitud”. ¿Cómo se explica ese galimatías contraproducente e ilógico?

Financial Times/HOY del 11-08-09 informa que los precios del azúcar cotizan a US$19.75 libra, el mejor desde 1974 que escaló a US$0.65 libra, y en estos momentos de recuperación de la industria azucarera y de las eficientes gestiones del ministro de Turismo, Francisco Javier García. para mantener óptimo ese sector, el cura Hartley insiste en perjudicarnos, no ya solo a su archienemigo Vicini.

El Nacional del 21-08-09 editorializó en e1 tenor de que 1a Cancillería y el Congreso deben pronunciarse para la primera solicitar a El Vaticano controlar a su retaliativo pupilo y e1 segundo emitir un voto de censura por un descrédito que no merecemos.