Un desdichado “esprit de corps”

Un desdichado “esprit de corps”

Para mí ha sido un espectáculo realmente triste y lamentable ver al secretario general y otros dirigentes del PLD convocar a la prensa para mostrar el peor sentido del “esprit de corps” al salir en auxilio de un compañero de partido y funcionario que admite tener una millonaria deuda impagada con una distribuidora de electricidad.

El “esprit de corps” es un galicismo de origen militar y significa el sentimiento de honor y orgullo que comparten los miembros de un grupo en base a sus ideales o logros compartidos.  Pero, ¿qué honor u orgullo puede haber en defender un compañero expuesto al escarnio por acumular una deuda enorme por no pagar la luz?

Euclides Gutiérrez Félix, de quien no me pesa decir que me considero amigo pues él hábilmente logró que le tome afecto ya que es un personaje interesantísimo, puede que hasta tenga razón en su alegado conflicto legal con la distribuidora que le cortó la luz. Uno no sabe; pero no regatearé el escaso beneficio de la duda.

¿El que exista un supuesto litigio entre el doctor Gutiérrez Félix y la distribuidora de electricidad es suficiente razón o motivo para cesar en la obligación legal y cívica de pagar la energía que le es facturada? A mi humilde entender no. Igual piensa una enorme mayoría de quienes han opinado al respecto, desde lectores de medios digitales hasta ciudadanos de a pié indignados por el evidente privilegio que disfruta don Euclides.

No es por profesor, autor de “best-sellers”, brillante articulista, historiador, edecán de Fidel o discípulo de Bosch, senador precoz, polemista “braguetudo” ni ninguno de sus atributos que Gutiérrez Félix logra acumular impunemente una deuda impagada enorme y seguir con luz.

Ese impolítico privilegio resulta por ser funcionario y su proceridad militante dentro del PLD, donde le consideran con cierta justicia un líder emblemático, o sea de significativa representación, por ser cofundador de ese partido y miembro de su cenáculo mayor, el poderoso comité político, muchos de cuyos integrantes poseen la increíble delusión de creerse superiores o al menos pares políticos de Leonel Fernández, sugestión que el Presidente cazurramente no desalienta para mantenerlos mareaditos.

Quienes con mayor ahínco, y real “esprit de corps”, debieran decirle “Euclides paga tu luz” son sus compañeros de partido. Es lo que hubiera hecho don Juan. Y debemos hacer sus amigos que le apreciamos.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas