La chacabana,  que desde hace décadas ha formado parte del armario masculino, ya no es una prenda exclusiva de un hombre  distinguido. Su estilo se ha popularizado de tal modo que  se ha convertido  más que una simple  camisa, en un estilo de vida.

Esta prenda conserva su estructura intacta: mangas largas o cortas, alforzas verticales, a veces bordados, bolsillos en la pechera y faldones,  pero la variación en el color se ha constituido en “la nota diferente”. Ese detalle ha sido fundamental para penetrar en todos los gustos, incluso en el femenino.

“Para las personas consientes  de que vivimos en el Caribe,  la chacabana  es un estilo de vida porque se puede exhibir en cualquier evento sea formal o informal. Las mangas largas y cortas les dan este toque especial”, afirma Cristian Lagares, experto en el diseño y confección de ropa masculina por más de 30 años y propietario de la tienda Chakhabana by Cristian Lagares.

El reputado diseñador de ropa masculina precisa que aunque su uso no tiene hora  determinada, hay que tomar en cuenta el tipo de evento donde el hombre  vaya a asistir, debido a que influye  en su elección  color y  largo de las mangas. 

Cristian Lagares dice, por ejemplo, que para una boda en la playa el invitado debe asistir con prendas color  blanco o    pasteles. En caso de que la use para el trabajo, puede escoger lo que más  conviene a su   anatomía y gusto. 

La tienda Chakhabana by Cristian Lagares, en Santo Domingo y Santiago, ofrece esta popular pieza, famosa en toda la región del Caribe  y  en lugares como las Canarias y las Filipinas.

En ambas sucursales   el cliente encontrará diversos diseños, como  el modelo hindú y el  filipino.  En su nueva colección Nazar Spring Summer 2012, que presentará  este mes en República Dominicana Fashion Week de Santiago, se resaltará la elegancia y el misterio del Oriente, en elegantes  prendas.