París, (EFE).- La delincuencia en Francia tiene un costo económico de 150.000 millones de euros anuales, equivalentes al 7,5 % del Producto Interior Bruto (PIB), según un estudio publicado por el Instituto para la Justicia, un organismo privado de análisis.

Las violencias físicas y sexuales fueron evaluadas en 20.192 millones de euros, de acuerdo con la evaluación de Jacques Bichot, un economista profesor emérito de la Universidad de Lyon, que repite por segundo año consecutivo este ejercicio, cuyos resultados fueron revelados hoy por «Le Figaro».

Los homicidios por sí solos representan 1.400 millones, que resultarían de una cifra de 850 víctimas que estima el propio Bichot a partir de los 778 muertes calificadas con ese tipo legal a los que suma otros «crímenes perfectos» no descubiertos.

El economista multiplica esa cifra por la «tarifa» que oficialmente se atribuye a cada muerto por accidente de tráfico 1.263.255 euros). A eso se añaden, en particular «el perjuicio moral a los familiares» (127 millones de euros globalmente), la pérdida de producción por el encarcelamiento de los culpables (110 millones), el perjuicio moral de los familiares de los culpables y de las personas inculpadas (15 millones) o los gastos y el tiempo perdido (8 millones).

El autor del estudio responsabiliza al crimen organizado de unos costos de 23.891 millones de euros por su actividad, y calcula que para evitar delitos se dedican 10.000 millones de euros en seguridad privada, aparte de los 17.364 millones de la acción de las administraciones.

El fraude fiscal se estima en 16.800 millones de euros, el fraude social en 14.400 millones, las infracciones de tráfico en 11.435 millones, las estafas en 9.797 millones, los robos en 9.265 millones o el vandalismo en 5.214 millones. El delegado general del Instituto para la Justicia, Xavier Bébin, que reconoció la dificultad para evaluar los delitos teniendo en cuenta que en su mayor parte no hay dinero de por medio, justificó el trabajo para aportar pistas para la toma de decisiones políticas, en particular en materia penal.

«Según numerosos estudios estadísticos, 30.000 plazas de prisión suplementarias permitirían reducir la criminalidad en un 15 %», lo que significaría una inversión para el Estado de 1.000 millones de euros anuales, cuando la ganancia para la colectividad sería de 11.000 millones, explicó a «Le Figaro» Bébin. EFE