Katmandú. El japonés Nobukazu Kuriki es el primer escalador en tratar de escalar los 8.848 metros del Everest tras el terremoto del pasado 25 de abril que causó casi 9.000 muertos en Nepal, un ascenso que hará en solitario y que ningún otro alpinista aspira a realizar, por el momento, esta temporada.

Kuriki, de 33 años, se encuentra de camino al campo base de la montaña más alta del mundo, donde murieron 19 montañeros en el sismo de hace cuatro meses, y esta semana tratará de escalarla, dijo a Efe Gyanendra Shrestha, un portavoz del Ministerio de Turismo nepalí.

La fuente confirmó que Kuriki es el único escalador que ha solicitado el permiso para subir el Everest esta temporada y que solo unos pocos alpinistas los han pedido para ascender a otros picos de más de 8.000 metros como el Annapurna, el Manaslu y el Makalu.

Shrestha admitió que las autoridades de Nepal no tienen expectativas de que en esta temporada de otoño acuda un gran número de deportistas para ascender sus montañas y que esperan que los alpinistas retornen en primavera, la mejor época para escalar.   El Gobierno de Nepal declaró a principios de este mes “zona segura” la región del Everest, tras un estudio de la firma estadounidense Miyamoto International que constató que la mayoría de instalaciones de albergue y rutas del área sufrieron un impacto mínimo con el terremoto de abril.

El campo base del Everest y los primeros campos de esta montaña, que forman parte de la ruta de escalada al pico más alto del mundo, resultaron afectados por el terremoto de abril, que provocó una avalancha que incomunicó la zona durante más de una jornada y dejó 19 muertos.   De acuerdo con el Gobierno de Nepal, el terremoto y sus réplicas posteriores dejaron 8.898 personas muertas y 22.309 heridas, así como daños en casi 900.000 viviendas.